Nuestra especie endémica y emblemática de alta montaña, el pino de cuaba o pino criollo, está considerado En Peligro en la lista roja de la UICN en 2011, pero en nuestra lista roja de plantas vasculares de 2016, está en preocupación menor.
Dejemos de normalizar el horror. No hay justificación posible y mucho menos el «no todos». Hay que enfrentar la violencia machista desde la responsabilidad colectiva.
Mataron los hombres, mas no las ideas;
impregnadas han quedado en la memoria
de los que luchan contra viento y marea.
Los pueblos siguen escribiendo su historia
Salvador Allende trazó la tarea:
insistir en la lucha hasta la victoria.
La privatización de la política fragmenta a los partidos, siembra malquerencias y desconfianza entre sus miembros, les impide construir una mirada común, un relato común y compartir una misma voluntad. Los hace ingobernables.
La privatización de la política convierte a los partidos en maquinarias electorales, que se movilizan por candidatos y no por las urgencias económicos y sociales por las que lucha la población; convierte a los partidos en marcas blancas con tantas identidades en su interior como cargos públicos en disputa.
La privatización de la política provoca que los partidos se afanen en atraerse votantes desechables y no en formar y conservar militantes duraderos.
La privatización de la política encarece hacer política, donde importa más el dinero recaudado, que la conciencia política de quienes voluntariamente se organizan en el partido.
Blinken sabe que Abinader es de la misma cuadra de Hipólito Mejía, quien en 2003 envió tropas dominicanas a legitimar el genocidio de dos millones de irakíes, que no importan a la Corte Penal Internacional.
La contaminación atmosférica es el mayor riesgo medioambiental de nuestro tiempo, no sólo porque es un riesgo sanitario, sino porque también agrava el cambio climático y la seguridad alimentaria.
Los abusos, atropellos, el desmonte de políticas públicas y la negación de derechos no pueden llevarnos a la resignación de que nada va a cambiar después del Cambio PRM.
Resulta evidente de que la babelización de la conversación es una acción preventiva ante la peligrosidad de un relato común popular que convoque a la unidad.
Solidario, salvó a Evo Morales de la muerte. Colocó a la OEA y su actual alabardero en el basurero al que pertenecen y condenó sin ambages golpes de Estado e intervenciones extranjeras.
Nadie en el Estado ha tomado en cuenta la proximidad de la Reserva Fiscal Minera de Ávila con nuestra joya de biodiversidad, el Parque Nacional Sierra de Bahoruco.
A los trabajadores hay que compensarles con un aumento cada año, las pérdidas del valor del dinero que se ha tenido por la inflación.
La energía la asociamos a la vida, al sol, al viento, a los mares, a la fotosíntesis y al metabolismo humano.
La memoria militante conserva, guarda, vivencias, recuerdos, experiencias y saberes propios en los quehaceres de un partido político. También, de sus ansias o anhelos. Es una suerte de memoria de energías políticas pasadas y deseadas.
Hoy estamos viviendo otra de las absurdas situaciones que nos sirve el gobierno Abinader con resultados no previstos, en la producción y comercio y en el PLD.
Respeto a Venezuela y a sus instituciones es lo menos que debemos exigir a la OEA, EEUU y sus aliados de golpe electoral. Luis Abinader incluido.
Ni el Ministerio de Minería, ni el de Medio Ambiente han dicho nada sobre qué harán para impedir el daño a nuestro mayor tesoro de biodiversidad. Porque, ciertamente, no hay nada de sostenible en las explotaciones mineras en el país hasta ahora.
La era sigue pariendo influencers en un pueblo que no puede más, que se muere de dolor.
Y hay que acudir corriendo, pues se cae el porvenir.