No es la educación que fracasa: es el Gobierno
No se sorprenda si casi el 40% de los dominicanos y dominicanas, según mediciones recientes, entienden que nuestra educación ha empeorado en los últimos años.
No se sorprenda si casi el 40% de los dominicanos y dominicanas, según mediciones recientes, entienden que nuestra educación ha empeorado en los últimos años.
Sobre la base de que “el problema no es de dinero, sino de calidad de los docentes” el gobierno viene dando zarpazos al presupuesto de Educación.
Mientras el presidente nos narcotiza con Haití, la construcción se desploma; perdemos nuestra soberanía alimentaria favoreciendo las importaciones y la economía dominicana da síntomas de quebrantos muy serios que son quebrantos de las empresas y las familias dominicanas.
Nos deja, eso sí, su legado de patriotismo, militancia y entrega a la mejores causas de la humanidad que nosotros, en la Comunidad Ojalá, mantendremos siempre en alto. Gracias, Roberto, por tanto.
El gobierno está contento porque a la hora de buscar responsables el pueblo no buscará a Abinader y al PRM sino a los haitianos pobres.
Abinader, hijo de inmigrantes, paga la solidaridad y el sacrificio de Jacques Viau y el comando haitiano persiguiendo haitianas en los hospitales, despojándoles de lo poco que tienen y fanfarroneando en la frontera.
¿Por qué si Cuba no tiene cómo ni con qué amenazar al imperio más poderoso de la Historia? ¿Por qué semejante ensañamiento contra un pueblo pequeño e indefenso?
Aquí, frente a la incuria oficial y la gula privada que no previenen. Allá, ante el genocidio y la expropiación contra el pueblo palestino.
Los aranceles de Trump no son más que una gran arbitrariedad. Un abuso a escala planetaria. Un recurso más para hacer que todos paguemos las consecuencias económicas de sus desvaríos guerreristas.
Dispuesta a tomar la justicia en sus manos. Usualmente armada, puede agredir. Y hasta matar. Al gobierno que ponga ojo. En EEUU, en Europa, como aquí, son los mismos. Son los marchantes de Friusa.
El show de Monte Grande hace un año demuestra el carácter alabancioso del gobierno y su permanente disposición para engañar al pueblo con propaganda vacía.
Cuando cuentan las cuentas de Abinader, las del pueblo cuentan la tragedia del pollo a 80 y 100 pesos la libra; de la libra de arroz hasta a 60 pesos en los colmados.
La minera se baña literalmente en oro. La evidencia del daño ambiental por los derrames envenenados es tan abrumadora como los esfuerzos de Barrick para acallar cualquier denuncia.
Desde que se instaló el “cambio” del PRM y Abinader en 2020, lo que viene ejecutándose es un sostenido complot contra la educación dominicana.
Como el tiempo y la memoria no alcanzaron al presidente Abinader para enumerar todos los logros de sus cuatro primeros años, aquí le ayudamos a recordar algunos: Que el arroz, el pollo y el aceite subieron sus precios más del 100%.