Abinader buscando ideas
Desde que llegó al gobierno en 2020 quedó claro que el presidente Abinader no tenía idea de a qué se enfrentaba.
Así se explica que en sus primeros meses tuviera la idea de desguazar a Punta Catalina para venderla al sector privado despojando al Estado de su más importante, nuevo y jugoso activo. Una empresa que deja más de 200 millones de dólares al año.
Otra idea descabellada fue llenar el Estado de “botellas” a tal punto que la nómina fue incrementada en unos diez mil millones de pesos mensuales, 120 mil millones de pesos al año. El pueblo dominicano paga hoy con su sangre, su sudor y sus lágrimas los miles de vagos del “cambio”.
Otra idea “brillante” por lo contrahecha fue la decisión de sembrar maíz en Guyana habiendo aquí millones de tareas de tierra sin cultivar y proyectos cerrados como La Cruz, de Manzanillo.
Esto es, el gobierno se proponía crear empleos, pero en Guyana, adonde, además, ha ido a hablar de defender áreas protegidas que aquí desprotege.
Que el presidente y su gobierno, cinco años después, siguen con problemas de creatividad lo demuestra su convocatoria a un “concurso de ideas” que, de entrada, tiene dos inconvenientes: Primero, fue convocado con cinco años de tardanza y, segundo, las ideas que busca Abinader no son para ahora, sino para el 2036. ¡Qué bárbaro!
Asombra ver cómo emplea tiempo y dinero el gobierno Abinader-PRM dando tumbos de un disparate a otro y de un invento a otro, mientras familias y empresas suspiran por una sola idea que les devuelva la confianza y la esperanza que ya perdieron.
Espacio pagado
Quienes habitamos la Comunidad Ojalá sabemos que somos diferentes y nos alegra serlo.
Nuestros contenidos son útiles para comprender y mejorar la vida cotidiana. Están libres de publicidad. Los anima la curiosidad, el rigor y los financia la gente.
Únete. Participa. Haz un donativo.
