Cacerolazos derrotan publicidad
Vencieron las cacerolas a la publicidad estatal; venció el pueblo al Gobierno de Abinader y a su reforma fiscal.
Vencieron las cacerolas a la publicidad estatal; venció el pueblo al Gobierno de Abinader y a su reforma fiscal.
En el Gobierno del Cambio la corrupción es la norma y la transparencia, excepción.
El pueblo, desesperado, espera una solución, mientras el gobierno perremeísta acecha como cazador a su presa, dispuesto a arrebatar hasta el último centavo que la gente gana con el sudor de su frente en empleos mal remunerados.
El PRM se destaca por profundizar lo que está mal, arruinar lo que está bien y borrar el rastro de lo que se hizo.
Todo fue parte de un discurso populista disfrazado de cambio, que hoy, las dominicanas y dominicanos sufren, pues, al igual que rateros, el Cambio los ha engañado.
El presidente Luis Abinader se ha convertido en un astuto cirujano político, especializado en extirpar cualquier política pública que el pueblo pueda disfrutar.
El partido morado se atrevió a convertir las demandas de la gente en conquistas del pueblo.
La gente disfruta de apagones en noches de calor, con mosquitos en concierto tocando una suave canción; y, para colmo, Abinader venderá apagones a Puerto Rico, en un gesto de compasión.
Los viajes en yola, los apagones y el hacinamiento en los hospitales estaban en peligro de extinción, pero han renacido, porque quienes dirigen carecen de sentido común y corazón.
La falta de energía eléctrica ha revitalizado el emprendimiento local: la venta de inversores, velas, lámparas de trementina y focos, cosas que las dominicanas y dominicanos ya habían olvidado.
Hoy, más que nunca, todo es lúcido en palabras y sombrío en hechos. Más que evidente la corrupción transparente.
Luego del fatal diagnóstico de cáncer perremeísta, que se diseminó, dañando órganos vitales como Medicamentos de Alto Costo, SNS, red hospitalaria, Sistema 9-1-1 y programas de prevención, la mortal enfermedad del cambio ganó la batalla.
El Alzheimer que afecta al PRM refuerza la inalterable cultura histórica de destruir todo lo que no beneficia a los sectores que representa.
¡Sube el telón! Así comienza la obra de transparencia y justicia, palabras de moda que el Gobierno dominicano usa mostrando una habilidad insuperable para mantener al pueblo distraído. El verdadero talento del PRM se remonta a la antigua Roma y a la dominicanización de la estrategia “pan y circo” (panem et circenses, en latín), frase […]
Debemos levantarnos y luchar valientemente contra el odio, para obtener nuestra felicidad o permitir que, por cobardía, el cambio nos explote como esclavos en tiempos de la colonización y saquee nuestros recursos, llevando entre sus manos nuestros sueños.