El ambicioso Plan de Desarrollo Turístico concebido por el gobierno para Cabo Rojo, Pedernales, se materializará entre importantes espacios protegidos por su valor ecológico. Esto mantiene en vigilancia a los grupos ambientalistas, los cuales esperan que la iniciativa no perjudique las reservas naturales de la provincia, que son un 60 por ciento del territorio y que son vitales para un proyecto sostenible.
Uno de cada tres sitios naturales y uno de cada seis sitios del patrimonio cultural están actualmente amenazados por el cambio climático.
El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), de Perú, ordenó este miércoles a la Refinería La Pampilla S.A., propiedad de la empresa trasnacional Repsol, cesar la mezcla de arena impregnada con petróleo crudo con arena limpia como metodología de limpieza en playas de la región Lima, tras el derrame ocurrido hace tres meses.
Las temperaturas récord en el Ártico y en el Antártico, unido al desprendimiento de la plataforma Conger de 1.200 kilómetros cuadrados el 15 de marzo en la Antártida oriental, son una seria llamada a priorizar las medidas para proteger el clima.
En los últimos años ha crecido la presencia de los niños en los escenarios de discusión política sobre el cambio climático y el medio ambiente. El fenómeno comenzó con Greta Thunberg y en Colombia ha sido Francisco Javier Vera Manzanares su representante.
Ojalá, República Dominicana
Hablemos de Cabo Rojo. Es verdad, no está protegido, pero todos los alrededores sí. Por lo tanto, todo desarrollo en la zona costera del Parque Nacional Jaragua, que sí está protegido por este protocolo, debe ser sostenible y un megaproyecto como el propuesto y sin licencias ambientales, no lo es. Entonces,¿debemos creer al señor ministro?
El Caribe, República Dominicana
El ecologista Danilo Almonte, residente en esta comunidad, consideró como un crimen ya que se está pretendiendo acabar con esta especie de árboles, extinguir el habitad de aves migratorias endémicas que vienen a esta zona a parearse en la época del año.
La temporada de huracanes de 2020 fue una de las más activas desde que se recogen datos, con 30 tormentas con nombre registradas. Los científicos han demostrado que, en ese mismo año, la temperatura media global de la superficie del mar se incrementó en más de 1 °C, en comparación con los niveles preindustriales.
Se ha sugerido que el aumento de la temperatura de la superficie puede haber influido en la intensidad y la concurrencia de las tormentas, pero es difícil desentrañar los diversos efectos climáticos que compiten entre sí en los parámetros de estas borrascas. Lo que sí está claro es que los seres humanos estamos detrás del aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera.
La observación y el estudio durante una década de una población de herrerillo común, Cyanistes caeruleus, en los pinares de Valsaín (Segovia) ha permitido a un equipo de investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid (MNCN-CSIC) confirmar los cambios ambientales que se han producido en la zona y analizar cómo han afectado a la abundancia de los parásitos que infestan a estas aves.
La circulación oceánica, es decir la manera en que se mueven las aguas, acontece tanto a nivel superficial como en las zonas más profundas de los océanos del planeta. Este movimiento tiene interconexiones importantes con las distintas capas de la atmósfera, aunque su mayor influencia es sobre la biosfera.
El cambio climático no es neutral en cuanto al género se refiere, y para la activista Fátima Muriel, este hecho es demasiado real para miles de mujeres en su país de origen, Colombia.
En 2017, un desastre de grandes proporciones golpeó su ciudad natal Mocoa en el departamento de Putumayo. Justo antes del amanecer del sábado 1 de abril, lluvias inusualmente fuertes provocaron inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra que sepultaron varios barrios y sus habitantes a lo largo de las orillas de los ríos Mocoa, Sangoyaco y Mulato.
Gracias a un grupo de científicos se establecieron estos límites planetarios, que tienen unos umbrales que no se deberían cruzar, si pretendemos preservar el medio ambiente y con ello la capacidad de que la Tierra albergue vida en ella.
Lamentablemente varios de estos umbrales ya han sido superados.
Con la instalación en 1884 de tres edificios en la península de Río de Oro (Villa Cisneros, actual Dajla), la bahía de Cintra y en Cabo Blanco se inicia la colonización española del Sahara Occidental, un periodo que se prolongaría hasta 1976. Durante casi un siglo y en paralelo a las actividades militares y comerciales, científicos españoles exploraron este territorio desértico para cartografiarlo, estudiar su geología, su flora y fauna y la cultura de sus habitantes nómadas.
“Aquellas expediciones mostraron los valores de una naturaleza hoy perdida”, apunta el profesor José Antonio Rodríguez Esteban del Departamento de Geografía de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), quien ha recorrido lo que un día fue el Sahara español, ha participado en varios documentales y ha publicado numerosos trabajos sobre esta antigua colonia del norte de África.
Ojalá, República Dominicana
Estudiar una carrera de ciencias, aunque sea en la UASD, sale muy caro y es necesario un esfuerzo doble o triple de lo que cuestan otras carreras porque para obtener un profesional de calidad en ciencias hay que estar al día y a menudo eso significa añadir contenidos extras al currículo vigente debido a la cantidad de información que surge cada día en todas las disciplinas científicas.
En su llamado a la acción, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó el lunes un estremecedor informe donde señaló que el 99% de las personas respiran aire insalubre, principalmente causado por la quema de combustibles fósiles.