Las negociaciones preparatorias de la Conferencia de la ONU sobre Biodiversidad (COP15), prevista para finales de año en Montreal, continúan a baño maría. El principal obstáculo es la falta de entendimiento entre los países en torno a un nuevo acuerdo que establezca metas para la protección de la diversidad biológica. Uno de los principales obstáculos parece provenir de Brasil, hogar de uno de los mayores stocks de fauna y flora del planeta.

Según WWF International, citado por Valor , los representantes brasileños están “trabajando activamente para socavar” las negociaciones sobre biodiversidad, actuando como un “bloqueador de negociaciones, introduciendo propuestas de última hora y diluyendo las ambiciones sobre conservación de la biodiversidad”. Así quedó claro en la reciente ronda de discusiones sobre el nuevo acuerdo, que tuvo lugar en Nairobi (Kenia), donde Brasil criticó la propuesta de establecer un objetivo de conservación del 30% de la superficie terrestre y marina mundial para 2030.

El principal reproche de WWF Internacional radica en la falta de voluntad de los negociadores brasileños para analizar propuestas de reforma de los sistemas alimentarios, en línea con los intereses de los grandes agronegocios. “La destrucción de la selva amazónica es un buen ejemplo de la pérdida de biodiversidad impulsada por los sistemas alimentarios actuales y su preservación debe ser una prioridad para los representantes del país”, dijo la entidad.

Por otro lado, WWF coincidió con la posición de Brasil en estas discusiones: la que defiende la necesidad de que los países desarrollados avancen con un mecanismo de financiamiento para la preservación de la biodiversidad en los países en desarrollo.

Cuestionado por Daniela Chiaretti en Valor , el jefe negociador de Brasil en el CDB, Leonardo Cleaver de Athayde, rechazó que el país esté siendo un obstáculo para las conversaciones sobre el nuevo acuerdo de biodiversidad. Sin embargo, advirtió que existe el riesgo de fracaso en estas negociaciones, sobre todo si no hay avances en el lado del financiamiento. “Estamos tratando de llegar a un consenso sobre la aprobación de un paquete de financiamiento robusto. Si no se aprueba este paquete, si aprobamos un marco global sin los medios adecuados de implementación, será muy débil”, dijo Athayde.