Cierra los ojos e imagínate, una persona en silla de ruedas, o con discapacidad auditiva o visual, llegando a una sucursal bancaria a abrir una cuenta de ahorros. ¿Qué apoyo te gustaría que recibiera?
Gracias a la Ley No. 5-13, el Reglamento de Protección a los Usuarios e iniciativas privadas, 82 % de las entidades financieras cuentan con rampas de acceso, 73 % con parqueos exclusivos para personas con discapacidad y 45 % con barras de apoyo.
Sin embargo, en República Dominicana, sólo el 30 % de las entidades de intermediación financiera tiene un programa de concientización para el trato de las personas con discapacidad y 16 % de las entidades tiene personal capacitado para el servicio de lengua de señas en sucursales seleccionadas.
En República Dominicana, más del 66 % prefiere recibir sus remuneraciones en efectivo y más del 90 % de los que reciben abonos en cuentas de depósito los convierten rápidamente en efectivo*.
Esto revela que si no nos detenemos a analizar y modificar la forma en que se consume en el país, no podremos cambiar significativamente esos números.
A los dueños de micro y pequeñas empresas, debemos ofrecerles soluciones de pagos de fácil uso y de bajo costo de apertura, mantenimiento y por transacción, que permitan digitalizar la cadena productiva.
Hablamos del pago del transporte en carro público y motoconcho, a la compra de frutas y empanadas en las microempresas instaladas en la calle.
A los consumidores, también, tenemos que acompañarlos y educarlos sobre el uso de las tarjetas de débito y los beneficios de tener cuentas de ahorro en cuanto a seguridad y prueba de sus ingresos, como un factor de evaluación de crédito.
“Microsoft anuncia el despido de 10 mil empleados”, fue titular de los principales periódicos el 18 de enero de 2023. Noticias como éstas, son cada vez más frecuentes: tanto para Meta, Amazon, Twitter, Dell, entre otras.
A la par, informan que invierten en compañías como Open AI o recompran sus propias acciones.