Este Gobierno, producto de la mentira y contando con apoyos espurios, tiene acumulados un exceso de pasivos en poco menos de dos años.

Listaré algunos de ellos:

1) La sociedad espera una explicación de los fideicomisos que han tratado de colar (Punta Catalina, por ejemplo), violando las leyes vigentes.

Sobre fideicomisos, la lista es larga y los pre-seleccionados a ser beneficiarios, al no darse a conocer con transparencia, mueven las elucubraciones del morbo. Ha habido opacidad y transparencia nula.

2) Denuncias de compras inadecuadas en los ministerios, direcciones y otras entidades, principalmente Educación, Salud Pública, Agricultura, INABIE y paro de contar… deben ser aclaradas.

Hay muchas denuncias escandalosas que salpican todas las instituciones, incluidas las militares.

Respecto al inusual asesinato de un Ministro por parte de su Asistente Especial, el caso merece explicaciones a la población tras las dramáticas denuncias de un empresario suizo en un programa de investigación.

Los nombres mencionados en este lamentable hecho incluyen familiares y amigos.

Realmente, la imagen del Gobierno y sus autoridades se advierte deteriorada por la opacidad, poca transparencia, la manipulación, deseos de callar a los denunciantes, el uso inusual de las mentiras por parte de sus funcionarios. El deterioro de los servicios que eran elogiados.

En fin, la sociedad clama por mayor transparencia, tranquilidad, seguridad y coherencia entre las palabras y los hechos del Gobierno.

Llegando a la mitad del mandato, que por error les dio el pueblo, lo que se advierte es que el cambio fue un engaño.

La sociedad anhela tranquilidad y esperanza.