Son muchas las acciones que pueden ayudarnos a enfrentar momentos de crisis, como el que se dice se avecina en términos alimentarios.

La pandemia, la guerra en Ucrania y sus efectos económicos afectarán a muchas naciones. Como de costumbre, los más pequeños podrían ser los que peor la pasen.

Este panorama pudiera aliviarse un poco, quizás, con las políticas adecuadas desde los gobiernos y organizaciones. Fortalecer las capacidades agropecuarias internas, apoyar a quienes producen los alimentos y ofrecer facilidades para que la seguridad y la soberanía alimentaria no se afecten en mayor magnitud. 

Un ejemplo de acciones integrales que pueden tomarse en cuenta es el que les comparto a continuación. 

Groundwork Lawrence, una organización sin fines de lucro, con la que tengo la dicha de trabajar, involucra de una manera fantástica acciones comunitarias y producción de alimentos de calidad, para que lleguen a la gente que realmente lo necesita. El año pasado, 9 mil libras de alimentos se produjeron y fueron donadas. 

Los jardines comunitarios son una fuente de alimentos frescos, empleos e integración. Son creados en espacios abandonados y/o contaminados, rescatados para lograr lo que anteriormente les conté, y se ubican en parques y vecindarios. 

Además de este proyecto, desarrollan programas educativos sobre el medioambiente, voluntariados, programas especiales para jóvenes de secundaria que viven en la ciudad, eventos especiales para mejorar los parques y la siembra de árboles en la comunidad. Más de 3 mil se han plantado en la ciudad, también ofrecen árboles gratuitos a quienes lo deseen sembrar en sus casas.

Es agricultura urbana, reverdecimiento de los espacios abiertos, calidad de vida, empleos, alimentos y solidaridad.

Si en el futuro faltará comida, humanidad y salud ambiental, este es un ejemplo fantástico de cómo puede hacerse y lograr grandes resultados. 

Aquí puedes conocer más: https://groundworklawrence.org/UrbanAgriculture