Organismos internacionales nos evalúan. Viven de eso y en eso. Y qué bueno, pues para el gobierno todo va a pedir de boca.

Que no es lo que dicen las evaluaciones internacionales.

Latinobarómetro 2023, un ejemplo, acaba de detectar retrocesos en la democracia dominicana.Del 39 al 36%, período 2020-2023.

62% está insatisfecho con la democracia gestionada por el “cambio”.

El período evaluado coincide con los tres años del actual gobierno, de modo que se trata de una evaluación de las políticas de Abinader y el PRM.

Otras evaluaciones no miden conceptos tan abstractos como “democracia”, “autoritarismo”, etcétera.

La última encuesta Enhogar, por ejemplo, nos informó que el analfabetismo aumentó de 5.5 a 6.5%en los últimos tres años.

El Ministerio de Educación, de su lado, nos informaba que más de 200 mil jóvenes no han regresado a la escuela luego de la pandemia.

Es decir, el gobierno ha sido incapaz de regresar a las aulas a casi un cuarto de millón de jóvenes.

La más importante encuesta, sin embargo, corresponde a la gente que ve cómo se le va de las manos todo lo que tuvo antes del “cambio”: estabilidad de precios, más oportunidades gracias a políticas de crédito y micro-crédito acertadas y proactivas; inflación controlada, más comida, más solidaridad del Estado bien planificada y dirigida…

La cosa es simple para la gente. Más inflación y menos comida es menos democracia. Más analfabetos es menos democracia. Menos oportunidades es menos democracia. Más inseguridad es menos democracia. Más desempleo es menos democracia.

Porque democracia es el derecho que tenemos a vivir sin necesidades y con dignidad.

No es nada democrática la realidad que enfrenta todos los días la gran mayoría de la población dominicana.