El Plan Nacional de Reforestación y Restauración de Ecosistemas Forestales lanzado por el presidente en 2023 concluirá en junio próximo. Plantarían 20 millones de árboles en 320 mil tareas. Van, según anuncian, por 16 millones y pico, una buena parte de mangos y aguacates.

 Pretendían aumentar del 40% aproximado que quedaba en 2020, al 68% la cobertura boscosa, pero no han protegido ni lo que encontraron y se han quedado contando matas.

El plan Reforestemos Quisqueya sembró 59 millones de plantas en Barahona, San Juan, Azua, Bahoruco, Elías Piña e Independencia.

Sólo en las últimas provincias fronterizas, se plantaron más de 12 millones en más de 147 mil tareas, cifras muy cercanas  a las enarboladas como logros por el ministro de Medioambiente y la alcaldesa del Distrito Nacional.

 Reforestemos Quisqueya, en sus siete proyectos de reforestación, integró a 12 mil 367 familias que, con apoyo del gobierno, dejaron de deforestar para reforestar su Patria.

Si todas las reforestaciones son como la que denunciaron en Octubre comunitarios de Mao en la cual  dejaron abandonadas centenares de plantas, pero muy anunciada en prensa y vídeos en redes sociales, ya sabemos cuáles serán los resultados.

Mientras, en la misma Línea Noroeste denuncian incendios o tumbas en el arroyo Manaclas y el río Yaguajay, en el Saltadero del Naranjito y en Punta Bergantín de Puerto Plata.

Nuestro país necesita más reforestación y menos propaganda