Hace semanas advertiamos que parecía que estábamos ante un gobierno de riferos, y nos equivocamos.

La cosa es peor, el Cambio nos gobierna con los bolos marcados y eso es trampa.

Lo de la Lotería son cheles que se llevan de paso a un pobre ciego.

Hay marcados bolos más grandes en medio de bultos pequeños.

El bolo de los préstamos pronto llega a los 15 mil millones de dólares y nadie sabe en qué se han invertido.

El bolo marcado más triste es la escalada de precios a todos los productos que consume la población. Ese bolo da pobreza y miseria y no hay vidente que nos arregle el sueño.

Los bolos en la agropecuaria están marcados para grandes productores, intermediarios y especuladores, los chiquitos no sacan ni » Colita».

Los miles de cancelados por el Cambio no tienen quien les arregle los números para cobrar sus prestaciones. Ese es el bolo de la injusticia.

En Salud Pública los bolos marcados por el poder se llevan ministros y vice ministras antes de que se revele el «Palé».

Y el bolo marcado más cínico lo gana el contrato de 120 millones de dólares a Pfizer.

Insólito, no han entregado una vacuna y le dan preferencia por encima del solidario pueblo y gobierno de China.

Para quienes dicen que el Cambio va, le damos la razón, el Cambio llegó y con fuerza.

Gobiernan con una rifa llena de trampas y los bolos marcados para su gente.

No les importa; los pobres que esperen a quien les arregle el sueño de vivir con cierta dignidad.

Luego hablamos de más bolos marcados, porque este Cambio lo marca todo ántes de jugar limpio.