A su tumba

20-03-2024
Literatura
Ojalá, República Dominicana
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Felipe Arroyo nació en Santiago, creció en Cienfuegos, murió en la madrugada. Hizo causa con la gente, cantó con los indigentes, bailó con los protestantes. Brindó con los obreros, merendó con los campesinos, durmió con Rocío. Incendió los inviernos, apagó los veranos, floreció las primaveras. A su muerte, la vida. A su pueblo, el corazón. A su tumba, los huesos.

Felipe nació en el arroyo, creció en el pueblo, murió en primavera. Apagó cien fuegos, incendió las protestas, floreció los obreros. Bailó con los campesinos, merendó con los huesos, protestó con la vida. Cantó en la madrugada, hizo causa en verano, brindó con la gente. A su invierno, la muerte. A su corazón, los indigentes. A su tumba, el rocío.

Santiago nació en Felipe, creció en verano, murió en la causa. Incendió los corazones, floreció las madrugadas, obró en los campesinos. Brindó con los indigentes, merendó con el canto, durmió con el fuego. Roció la vida, primaveró los inviernos, protestó la muerte. A la gente, su arroyo. A los huesos, su pueblo. A la tumba, su baile.