No fueron cien libros. Fueron ciento diecisiete y fueron ciento diecisiete autores y autoras los que pusieron en circulación sus obras en la Octava Feria Internacional del Libro de San Pedro de Macorís.

Sin dudas, estamos hablando de un acontecimiento excepcional para una feria provincial y de un reto más cumplido—y superado—por la Coalición Cultural y Literaria de esa provincia.

En cinco días, hasta el domingo 23 de noviembre, más de veinte libros, en promedio diario, fueron presentados ante un público fiel que respondió al llamado de la Coalición y de sus incombustibles animadores, los escritores Aurelia Castillo y Juan Aquiles Galván, quienes entienden que “Con este evento le hacemos un homenaje a la literatura universal”. Y tienen razón.

Una veintena de los escritores y escritoras participantes fueron niños y niñas de doce años de edad quienes por primera vez se animaban a escribir, organizar y componer sus primeros versos y sus primeras narraciones.

Nuevos escritores y escritoras y otros ya consagrados del oficio acompañaron a aquellos niños y niñas en la aventura de escribir, leer y presentar lo ya escrito. Padres y madres orgullosos los acompañaban y estimulaban al tiempo que participaban del acontecimiento cultural y literario.

Pero eso no es todo. La Feria del Libro que organiza por octavo año consecutivo la Coalición Cultural y Literaria de San Pedro de Macorís es una feria internacional. Escritores de Argentina, Uruguay, México, Colombia, España, Estados Unidos, Bahamas, Líbano, Guyana Francesa presentaron sus libros ya en persona, ya vía internet.

¿Existe una feria de semejantes características en la República Dominicana?

No la conozco.

¿Lo lamentable?

Que el Ministerio de Cultura y otras instituciones oficiales brillen por su ausencia en un suceso tan importante. Que por vaya usted a ver cuáles razones se abandone a su suerte lo que sin dudas es un ejemplo digno de ser imitado.

Nuestras felicitaciones para Aurelia Castillo, Juan Galván y la Coalición Cultural y Literaria de San Pedro de Macorís por este éxito y ese ejemplo que auguran los nuevos triunfos que vendrán.