Constitución inerte
Estado indiferente al crimen cuando de obtener ventajas se trata. Es propicia la fecha para denunciar y atreverse a combatir la condición inerte de la Constitución.
Estado indiferente al crimen cuando de obtener ventajas se trata. Es propicia la fecha para denunciar y atreverse a combatir la condición inerte de la Constitución.
En el texto, el firmante se atribuye una culpa que no es individual. El candidato presidente dijo “lo juro” de manera voluntaria y pública. Nadie ha denunciado intimidación, violencia, dolo o error, para conseguir la promesa.
La Ley 20-23 Orgánica del Régimen Electoral conserva la definición de transfuguismo, aunque deroga la tipificación de tránsfuga, esa que atribuía la condición a los que traicionaban a sus compañeros de partido para pactar con otras fuerzas políticas.
Queda para el relato histórico aquella primera amenaza de cierre, con plazo de 72 horas y el cierre; pasaron sin pena y con difusa gloria. Los trabajos continúan ignorando la petición dominicana.
El hallazgo provocó estupor. Los habitantes cercanos al Cementerio Cristo Salvador – Santo Domingo Este- alarmados y conmovidos, decidieron llamar al 911 y de inmediato la noticia concitó el interés nacional e internacional.
Sin resolución, la frontera, con sus escapes irremediables, continúa cerrada. Hoy, en LA Semanal, además de comentar el resultado de las primarias en su partido, el presidente dirá cuál es la ruta a seguir.
Ocurrió hace 60 años, quedan cruces y acotejos. Héroes y villanos convivieron, algunos lograron, después del regateo de hazañas, ocupar espacios en los altares de la patria.
El cierre permanente de la frontera es impensable. Salir airoso de un lance como este, exige además de narrativa y respaldo, estrategia y suerte.
Asombra que los veedores éticos no se percaten de tantos desaciertos e ignoren la comedia diseñada para esconder un drama. “Los errores subsanables” están convirtiendo en inservible el ordenamiento jurídico.
El sacerdote incluyó en el sermón la queja porque el presidente no había retribuido su trabajo político. Convirtió el templo en local de partido cuando expresó: “esta es la iglesia del partido que está gobernando”.
El Cambio no se inmuta con ese remedo anacrónico de culto a la personalidad. El clímax sucedió en la conmemoración del 160 aniversario de la Restauración de la República. El director de Efemérides Patrias, emocionado, proclamó en Santiago, “líder restaurador” al mandatario.
El presidencialismo en su mejor momento. Como si algo faltara, entre los escombros emergió la creatividad del director de Proyectos Estratégicos y Especiales de la Presidencia para anunciar la construcción de una Gran Plaza homenaje a las víctimas.
Ya el senador está libre y en cueros, no tiene que fingir menos persuadir amparado por una línea de crédito. Su campaña será transparente y quizás ahora menos pródiga. Corresponde a los electores votarlo o botarlo.
“No puede ser que queramos ser más garantistas que los países nórdicos” proclamó. Los aplausos retumbaron, demostrando la obsecuencia con el poder, aunque esté equivocado el jefe.
La obligatoriedad del debate no está establecida en ninguna ley, aunque en época de legiferar y de institucionalidad a la medida, todo es posible. Así comienza agosto, con calor, esperando el sacrificio.