Desde el inicio del presente gobierno, debido a los desaciertos de las autoridades, principalmente las del sector agropecuario, hemos advertido sobre el peligro de que nos conduzcan a la pérdida de la autosuficiencia alimentaria lograda por el país en los gobiernos encabezados por DANILO MEDINA.

Hoy vamos a ver los casos de la avicultura y la crianza porcina.

El PIB agropecuario ascendió el año pasado, a 269,247.95 pesos. El valor de los pollos vivos producidos ascendió a 22,036.21 y los huevos 12,131.71 millones, lo que en términos relativos representan el 24.38 y el 13.42 por ciento, para un total de 34,167.92 millones y un 37.80% del total del sub-sector pecuario.

El sector porcino representó un valor ascendente a 8,103.54 millones para un 8.96 por ciento del total.

La producción avícola y porcina se acercan al 50 por ciento del valor total de la pecuaria. Hoy en día son los sub-sectores mayormente amenazados por los desaciertos de las autoridades. Veamos:

En el mes de Octubre del 2020, planificaron una producción de 17.4 millones (meta lograda) para el mes de Diciembre que es el mes de mayor consumo.

Como se recordará se creó una escasez de tal magnitud que el precio de la libra llegó hasta 85 pesos. En algunos municipios y hasta provincias, no vieron el pollo tradicional de la nochebuena.

De ahí en adelante son palos a ciegas cada día sin ningún acierto. Comenzaron el año asegurando que el pueblo volvería a comer pollos a no más de 50 pesos. Ni por asomo se han acercado a ese precio.

Hoy en día, a pesar de mantener una producción creciente, el mes pasado produjeron 18.3 millones de unidades y haber autorizado una cantidad desconocida, permisos de importación concedidos a los miembros de la ADA, los precios se mantienen por las nubes, periódicos han publicado que en algunos casos ha llegado hasta a 125 pesos cada libra.

Lo cierto es que los precios que anunciaron no se han cumplido y en los mejores casos siempre han estado por encima de los 70 pesos.

Destaque la importancia de las actividades avícolas y porcinas, por las amenazas que se ciernen sobre ellas.

Importar productos comprándole a quien venda más barato, sin asegurar la calidad y sanidad de los productos, nos pueden traer situaciones perjudiciales como paso con el ingreso a nuestro país de la PPA.

Estamos importando sin necesidad, porque tenemos capacidad para producir y nuestros costos de producción son inferiores, con lo cual se demuestra o que estamos importando inflación o calidad inferior a la nuestra.

En el año de la actual gestión de gobierno, a través de la Dirección General de Aduanas, se han importado 49,115.52 toneladas de pollo; 40,082.79 toneladas de carne de cerdo y derivados y 3,703.96 toneladas de carne de res.

¿Quiénes se están lucrando de estas importaciones, porqué además de las cuotas establecidas por acuerdos, se están concediendo permisos que se venden al por mayor y detalle?

¿Quiénes se lucran de la venta de permisos y de las importaciones desmedidas que amenazan la producción nacional?

Es un momento adecuado para que se prohiban las importaciones de carnes y derivados para dedicar la producción nacional de cerdo a la industria de embutidos y, si es necesario, seguir aumentando la producción nacional de pollos.

Repito: tenemos capacidad instalada para producir más de 25 millones de unidades de pollos cada 40 días.

¡Paren el negocio de los permisos de importación y los consiguientes negocios que se derivan de importaciones sin controles!