No es justo que habiendo presupuesto para la alimentación escolar, en cientos de escuelas el desayuno sea un pan vacío con un juguito.

Duele ver que el almuerzo para millones de estudiantes sea arroz con un huevo hervido.

La alimentación escolar es una transferencia neta a miles de familias, dejarla caer es promover desde el gobierno, pobreza y desnutrición.

El año escolar casi termina y todavía hay centros educativos que no han recibido los libros y material escolar.

Miles de las computadoras que se entregaron a los estudiantes están dañadas, el ministerio no tiene respuestas porque no previó y diseñó una política de mantenimiento.

Todo eso es un injusto despilfarro de recursos.

Hay muy poca justicia en gobernar para que se importen decenas de productos que encarecen la canasta familiar, a sabiendas que con esa y otras medidas miles de nuestros productores van a la quiebra, mientras hacen más ricos a los importadores.

No es justo que el mes pasado se echarán a la basura miles de dosis de vacunas para el Covid y este mes también irán al zafacón más vacunas.

Ese es otro derroche de millones de pesos en medio de la situación económica que vivimos.

El Gobierno del Cambio es mal administrador del presupuesto, pero sobre todo, es indolente e insensible ante las necesidades de los más pobres y la clase media.

No es justo que ustedes desde el gobierno se burlen de la gente, haciendo añicos la vida de un  pueblo que creyó en ustedes.

No es justo que Luís y su gobierno sean tan injustos.