El negocio de la arena

06-05-2023
Quiero que sepas
Ojalá, República Dominicana
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Hace un año que el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente alertó sobre el incremento de uso de un recurso no renovable: la arena, el material sólido más usado en el mundo. Sólo el agua lo supera.

Cada año se extraen 50,000 millones de toneladas con las que se podría construir un muro de 27 metros de ancho y 27 metros de alto alrededor del planeta Tierra.

La arena es esencial para el desarrollo económico en la construcción de infraestructuras, pero su extracción de los ecosistemas que constituye, como ríos, lagunas y zonas costero-marinas, provoca erosión, infiltración del caudal, salinización de acuíferos, desprotección contra las marejadas y la destrucción de  hábitats de la biodiversidad.

En RD es eterna la lucha contra el saqueo de playas, dunas y ríos. El faro a Colón y media ciudad capital se construyeron con las arenas ricas en hierro de las dunas de Baní durante el desarrollismo balaguerista.

Pero la oligarquía gobernante hoy, que ha disminuido la construcción en casi un 50%, ni siquiera se molesta en construir riqueza ni dinamizar la economía con las ricas arenas que extrae sin control y que por millones de años han arrastrado nuestros ríos.

Resulta que en 2021 exportamos casi un millón de dólares en arena, pasando al lugar 72 en el mundo; también este fue el producto 352 más exportado en el país. Los principales destinos: Turcas y Caicos ($699k), Aruba ($80.3k), Estados Unidos ($8.27k), Haití ($3.54k), y Canadá ($273).

Fueran buenas cifras si se tratara de Cacao u otro producto sostenible que generara riqueza por el encadenamiento productivo de su explotación, pero es arena, territorio nuestro que se va a otros países y somos solo tres cuartas partes de una isla.

La ley de medio ambiente es clara sobre la extracción de agregados de los ríos y dunas y es hora ya de parar a las mafias extractivistas de turno antes de que nos dejen sin ríos y de que corra la sangre de dominicanos que rechazamos el secuestro de agua y el saqueo de nuestros recursos.

Ángela Guerrero
Bióloga. Botánica. UASD.