Una tradición norteamericana desembarcó en República Dominicana en 2012, y desde entonces, nada ha sido igual en nuestro país.

Lo curioso es, que ya no es viernes negro, sino mes negro. Las ofertas no se limitan a cuatro días, de jueves a domingo. Comienzan el primero de noviembre y terminan a fin de mes. ¿Por qué no llamarle “Black Month”? Simple: “Black Friday” se ha convertido en una marca internacional con poder.

Muchos comercios en República Dominicana incluso dividen estratégicamente el mes en semanas, haciendo acuerdos con bancos para ofrecer cashbacks adicionales cada siete días. Resultado: captan nuevos clientes semanalmente, mantienen publicidad permanente, y los bancos elevan su facturación por tarjetas de crédito. Y funciona.

Ahora, como el fenómeno se extendió a todo el mes, el impacto se diluyó. Años atrás veíamos largas filas, personas madrugando fuera de los locales comerciales, corriendo como en películas de acción para aprovechar descuentos.

Recuerdo ver imágenes de personas durmiendo la noche entera fuera de los negocios de la Leopoldo Navarro para ser de los primeros en entrar al recinto. Hoy eso casi desapareció por la extensión del Black Friday durante todo el mes y el auge de las ventas digitales.

Es una época fabulosa para comprar ropa, electrodomésticos y hasta vehículos que necesitas, porque los comercios para abrir espacios a la nueva tecnología de 2026 y los nuevos modelos, hacen ofertas increíbles entre un 10 % y un 75 % de descuento.

Si es algo que necesitas y planificaste comprar, excelente noticia. Pero ojo: si se trata de que consigas un 50 % de descuento para luego financiarlo al 60 % de la tarjeta de crédito, ni lo pienses. Peor aún si es un deseo impulsivo y ni siquiera es una necesidad.

Te puedes ver tentado en éstas fechas, por el miedo a perderte las ofertas, pero es un momento para ser aún más racional, hacer una buena gestión de los cortes de tus tarjetas de crédito y consumir hasta el punto de evitar la mora y el sobreendeudamiento.

Finalmente, cuatro consejos esenciales de seguridad digital, si vas a comprar: no uses la misma contraseña en todas las plataformas, investiga los negocios antes de comprar, cuando no conoces el comercio usa intermediarios como PayPal para proteger tus datos, y guarda evidencias de compra por si necesitas reclamar en ProConsumidor.