Abejas, polinizadoras y Cambio
El Día Nacional del Apicultor, el año pasado, escribí sobre las abejas, la crisis ambiental y la pérdida de polinizadores.
La JAD anunció esta semana que en 2023 la producción de miel fue de 629,817 kg, es decir, 11,451.22 tanques de 55 kg. Eso demuestra que la producción sigue en menos de la mitad de los 24,000 que se registraron en 2021. Aunque ha subido después del bajón de los 6,312 tanques del 2022, tomando en cuenta que el 2023 fue el más cálido registrado.
Entonces, como dijimos el año pasado, el Cambio Climático no es el responsable de la baja producción de miel, sobretodo cuando casi se duplicó, con respecto al 2022, en el año más caliente.
Las autoridades lo que debían explicar es por qué en el 2022 hubo tan baja producción y no hacer propaganda anunciando congresos y manipulando datos, presentándolos en Kilogramos, quizás para abultarlos, y no en tanques, que es la medida usada.
Estamos muy conscientes de cómo afecta el Cambio Climático a toda la biodiversidad y lo hemos advertido y divulgado continuamente, pero también dijimos en aquel artículo que las principales amenazas de los polinizadores en nuestro país son el abuso de plaguicidas en la agricultura, la deforestación y los incendios forestales.
En la comunidad Ojalá denunciamos la mortandad de abejas por plaguicidas en Loma Siete Picos; en Las Calderas por la tala y quema, en Las Dunas de Baní, y en la Línea, en Mao, y por los incendios en Hato Mayor. Sea usted el jurado.
No se puede culpar al Cambio Climático de todo, pero sí podemos culpar al “Cambio” por una desastrosa gestión ambiental en los últimos cuatro años y las abejas y polinizadores no escapan a esta debacle.
Ángela Guerrero
Bióloga. Botánica. UASD.
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