60 años de bloqueo
(Ilustración: Martirena)
En febrero de 1962 el Gobierno de los Estados Unidos, encabezado por el presidente John F. Kennedy, impuso un embargo económico a la isla de Cuba.
En ese momento, los renglones de importación y exportación de esa nación caribeña con la norteamericana superaban el 70%. De modo que el llamado bloqueo no fue más que una medida para asfixiar la economía cubana y con ella a su pueblo.
Sesenta años han pasado de pura lucha y resistencia contra la desproporcionada injusticia internacional que se comete contra el pueblo cubano, denunciada hasta la saciedad ante organismos internacionales como la propia ONU, donde votan a favor del bloqueo cada año solo dos países de más de 190 y sin embargo se mantiene con mayor fuerza que el primer día.
Para el pueblo cubano, al que no se le ha respetado el sagrado derecho de adoptar el modelo político, social y económico que han establecido, el bloqueo ha significado la pérdida de 147,853 millones de dólares (con corte a mediados de julio del año pasado).
Cualquiera pudiera pensar que el bloque se trata únicamente de Estados Unidos a Cuba. Nada más lejos de la realidad. Además de imponer sanciones onerosas a las empresas estadounidenses por comerciar con Cuba, lo mismo ha hecho el Gobierno en seis décadas con otras naciones que osen intercambiar productos y servicios con la isla.
Se trata de una persecución internacional que bloquea recursos, insumos, materias primas, alimentos y medicinas.
Sesenta años de asedio obcecado no han impedido que Cuba desarrolle uno de los mejores sistemas de salud, reconocido por la OMS. Igual de educación y otras áreas. El único país de América Latina en desarrollar al menos cuatro vacunas contra la Covid-19.
¿El bloqueo será por miedo a que se demuestre que un mundo y un sistema diferentes y mejores son posibles?
Al unirme a las voces que exigen el fin del bloqueo contra el pueblo cubano, concluyo este artículo con las palabras del expresidente Barack Obama en 2014: “En estos 50 años (de bloqueo) se ha demostrado que el aislamiento no funciona”.
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