16 de octubre
Los partidos políticos tienen una función social e institucional importante en la democracia. Lo saben quienes militan en ellos, simpatizantes y también los que entienden, de manera errada o interesada, que no son necesarios, que no hay que «mantenerlos».
Entendiendo que siempre habrá presencia de la política en la cotidianidad de la gente, el PLD convoca a la ciudadanía en general y a sus miembros a la Consulta Ciudadana, para elegir a quien sería su candidata/o a las elecciones del 2024.
No es una convocatoria por hacerse los graciosos, sino que es la continuación de una serie de transformaciones que vienen ocurriendo desde que apostó por las primarias abiertas, y que ha seguido con trabajos internos, elección de su CP y su CC por votación, captación de nuevos miembros, auditoría de su padrón y otras labores que van más allá de lo electoral. Y todo esto ocurre, hay que reconocerle, mientras el partido y sus miembros son estigmatizados, acorralados y sentenciados moralmente a todo tipo de cosas.
Poco a poco, la organización se ha ido convirtiendo en un espacio cada vez más plural y diverso, donde se puede ver a jóvenes llegar a ser presidentes de comités intermedios, a su Comité Político y volverse sus voceros, gracias a su militancia y capacidad. Antes, era imposible.
El PLD es el único partido político que escucha y pide a la ciudadanía en general ayudarlos a construir su futuro. Sabe que es una herramienta social importante y busca que esa sociedad, a la que ha servido antes, se sienta parte de esa construcción. Estas apuestas son correctas y es lo que la gente realmente espera.
Tres mujeres y tres hombres han sido la parte más visible del proceso, pero una enorme cantidad de peledeístas ha trabajado durante meses para que esta sea una consulta democrática exitosa.
Invito a mis compañeras y compañeros a participar como históricamente hemos sabido hacerlo. Que primen la cordura y el respeto. A que Twitter no se convierta en el escenario del absurdo. Que los canales internos se usen adecuadamente y que, quien salga triunfador, sepa que esa misma noche, tendrán detrás de sí a toda la militancia morada, porque no será elegido por dedo o por capricho.
Que sepamos que fuera de nuestras filas hay carroñeros apostando al derrotero de un partido modelo, pero que las voces que realmente debemos escuchar, son las que irán a votar este 16 de octubre.
Hemos ido recuperando espacios y cariño. Y seguiremos en esa tarea.
En Luis, Maritza, Francisco, Abel, Margarita y Karen hemos redescubierto que nuestra mayor fuerza es la unidad y la preservación del partido. ¡Éxitos a todos!
Espacio pagado
Quienes habitamos la Comunidad Ojalá sabemos que somos diferentes y nos alegra serlo.
Nuestros contenidos son útiles para comprender y mejorar la vida cotidiana. Están libres de publicidad. Los anima la curiosidad, el rigor y los financia la gente.
Únete. Participa. Haz un donativo.