Más árboles en las ciudades podrían salvar vidas durante olas de calor
Un estudio publicado en la revista The Lancet calcula que aumentar la densidad arbórea urbana hasta el 30% -frente a la media actual del 14,9%- podría ayudar a reducir las temperaturas en 0.4 ºC durante las olas de calor estivales.
Según los investigadores, un tercio de las 6,700 muertes relacionadas con el calor que se produjeron en las 93 ciudades en 2015 podrían haberse evitado.
«Ya sabemos que las altas temperaturas en los entornos urbanos se asocian a consecuencias negativas para la salud, como insuficiencias cardiorrespiratorias, aumento de los ingresos hospitalarios y muertes prematuras», afirma Tamara Iungman, investigadora principal, en un comunicado de prensa.
«Nuestro objetivo es informar a las políticas locales y a los responsables de la toma de decisiones sobre los beneficios de integrar estratégicamente la infraestructura verde en la planificación urbana para promover entornos urbanos más sostenibles, resistentes y saludables»
Trío suizo
En Zúrich en 2015 se podrían haber evitado 10 muertes, en Ginebra cinco y en Basilea tres, calcularon los autores. Las ciudades suizas tienen unas tasas de cobertura vegetal del 12%, 14% y 24%, respectivamente.
Las temperaturas en las zonas urbanas también son notablemente más altas que en las zonas rurales que las rodean: 1.5 °C de media en toda Europa. En Zúrich, este valor en 2015 era de 2,5°C, pero podría reducirse en 0,5°C duplicando la cantidad de árboles y vegetación.
Según el estudio, las regiones meridionales y orientales de Europa son las más afectadas por estos problemas. Cluj-Napoca, en Rumanía, registró la mayor diferencia entre las temperaturas urbanas y rurales, con 4,1 °C.