El anís estrella endémico de RD tiene potencial para la farmacéutica, pero está amenazado

17-08-2024
Medioambiente
Diario Libre, República Dominicana
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Un estudio realizado por la bióloga dominicana Ángela Guerrero revela que el anís estrella endémico de la República Dominicana, conocido científicamente como Illicium ekmani, posee una gran diversidad de compuestos químicos con potencial de uso farmacéutico. Sin embargo, la especie se encuentra amenazada.

En la conferencia titulada: «Illicium ekmani: Distribución y conservación en la República Dominicana, resultados preliminares», se identificaron cinco grupos de poblaciones con una composición diversa de aceites esenciales y componentes aromáticos.

El anís estrella habita en los bosques ombrófilos y nublados, tanto de la cordillera Central como en la cordillera Septentrional.

Illicium ekmani.

La mayor población de anís estrella fue identificada en Loma Miranda, la «zona modelo» para el estudio. El Illicum de esta población posee más de 60 compuestos y su compleja composición química le permite defenderse de los insectos y adaptarse mejor a los cambios ambientales, según la experta, docente de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

  • «Hay que ubicarlos y hay que conservarlos, porque si no, no vamos a tener ningún beneficio«, afirmó.

En la investigación, realizada por Guerrero junto con Morgan Bida, Laura Tejada, Natalia Ruíz Vargas e Iris Marcano, se expone que los estudios bioquímicos de los aceites esenciales y compuestos volátiles del Illicium ekmani tienen potencial antioxidante, antiinflamatorio, antidiabético, fungicida, antibacterial e insecticida.

Illicium ekmani en Loma Miranda.

«Los terpenos, compuestos químicos presentes en la planta, son muy diversos. Uno de sus derivados son las lactonas sesquiterpénicas. El doctor Quirico Castillo, de la Facultad de Ciencias (de la UASD), ha descubierto varias moléculas de este tipo en otras plantas de la familia del girasol, con resultados prometedores en líneas de células anticancerígenas».

«Tenemos otra posibilidad si se identifican esas lactonas en nuestros Illicium, porque los de la Cordillera Central se caracterizan por sus sesquiterpenos en los aceites», explicó Guerrero, quien lleva más de 25 años investigando el género Illicium.

No obstante, la bióloga advierte que, para poder hablar de la explotación de esta planta, es necesario lograr su cultivo y domesticación. Pero dijo que hay mucha información desconocida sobre su ecología y adaptación, lo que requiere de estudios adicionales.

Especie amenaza

Illicium ekmani en Cerro Angola, Cordillera Central.

En la República Dominicana no existe producción intencional de anís estrella. Según Guerrero, la ganadería, la minería y la deforestación han reducido los bosques donde estas plantas habitan.

Por lo general, esta especie crece en bosques nublados y ribereños de montaña, ambientes que están bajo constante amenaza. «El Illicium ekmani está en peligro de extinción», dice la profesional que lleva más de 30 años ejerciendo la botánica.

Según la a Lista Roja en 2023 elaborada por la Comisión de Supervivencia de Especies de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el Illicium ekmani está catalogado como vulnerable.

Avances en la producción intencional del anís estrella

Actualmente, se está trabajando en la germinación de Illicium en el Jardín Botánico, aunque este proceso requiere de mucha humedad y bajas temperaturas, según indicó Guerrero en una entrevista con Diario Libre.

«La idea es reforestar zonas degradadas con Illicium, ya que en otros países de América Latina se está explorando la posibilidad de cultivarlo, y la especie china tiene una alta producción de aceite»Ángela GuerreroBIóloga“

En el país se han identificado algunas poblaciones de Illicium con capacidad de producción de aceite. Además, según la investigadora, estas poblaciones contienen una gran diversidad de compuestos químicos.

Entre los beneficios de una producción intencional de anís estrella en el futuro se incluyen el potencial ecológico y fitoquímico del género, la producción de aceite de Illicium para la industria cosmética y el uso de la variedad de compuestos químicos útiles para la industria farmacéutica.

Aunque su distribución es limitada, debido a su forma natural de dispersarse, que solo alcanza entre dos y cinco metros de distancia, en la República Dominicana existen dos especies endémicas: Illicium ekmani, registrada en una investigación de 1947, e Illicium hottense, descrita por la bióloga durante su maestría en 1997.

«Illicium hottense es la nueva especie que describí cuando hice mi maestría en la Universidad de Florida con el doctor Walter Judd», comentó Guerrero.

Actualmente, el anís estrella es muy utilizado en el país, pero el que se consume es importado desde China, Vietnam, Singapur, Malasia y otros lugares. Según datos a los que Ángela tuvo acceso en 2016, «se importaban más de seis millones de dólares en anís estrella desde el sudeste asiático».

El anís estrella se utiliza para mejorar la digestión, aliviar los gases, el dolor y los espasmos intestinales. También, se emplea en la elaboración de aceites y tiene un gran potencial medicinal gracias a la diversidad química de la planta.

Comunicación entre plantas

Las plantas se comunican y asocian. 
  • Otra observación acotada por Guerrero es que las plantas se comunican y asocian, creando comunidades. «La florística, cómo se agrupan y se asocian las plantas, nos da una idea de cómo funcionan los ecosistemas«, señaló. El anís estrella puede asociarse con hongos micorrícicos.

Para realizar esta investigación, se firmó un convenio entre la UASD y el Ministerio de Medio Ambiente, además de contar con financiamiento del Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondocyt).

Limitaciones de la investigación

El proyecto no se ejecutó como se esperaba, debido a la burocracia institucional, cambios de rector de la academia y de titular en el Ministerio de Medio Ambiente, además de la llegada de la pandemia del COVID-19.

«Esas fueron las dos causas principales del retraso», explicó. A pesar de esto, Guerrero no considera que el trabajo realizado esté incompleto, aunque reconoce que podría haberse desarrollado más.