Conoce algunas palabras que el idioma euskera heredó al español
Se dice que el euskera no tiene origen conocido ni relación con otra lengua, elemento que ha hecho a especialistas y lingüistas indagar en este misterio. Este idioma es hablado por más de 700.000 personas, el 35 por ciento de la población de la región donde él convive… ¿Ya sabes cuál es?
Con presencia en las regiones de Navarra y País Vasco, en el norte de España, y el suroeste de Francia, el euskera, el cual estuvo a punto de extinguirse, es una lengua genéticamente aislada ya que no pertenece a ninguna familia lingüística conocida.
“Nadie puede decir de dónde viene», apunta el profesor y director del Instituto de Euskera en la Universidad del País Vasco en Bilbao, Pello Salaburu.
La institución pública Etxepare Euskal Institutua ha señalado que “las vascas y los vascos nombramos el mundo en euskera”, la lengua que se habla a ambos lados del extremo occidental de los Pirineos.
Se reconocen a Álava, Vizcaya, Guipúzcoa y Navarra como los territorios peninsulares del euskera; en el País Vasco del Norte; Labort, Baja Navarra y Sola. El conjunto de estas siete provincias es denominado Euskal Herria en el propio idioma euskera.
Según el Etxepare Euskal Institutua, los últimos datos señalan que de una población total de aproximadamente tres millones de personas, 900.000 son capaces de hablar en euskera.
Expertos señalan que la lengua vasca ha demostrado a lo largo de la historia una enorme capacidad de adaptar vocablos y estructuras de otras lenguas.
¿Conoces las palabras que el euskera ha aportado al castellano?
Palabras tan importantes como izquierda, mochila, cencerro, alud, chatarra, órdago, aquelarre, chabola, cococha, o gabarra proceden del euskera, asimismo es posible que el vocablo perro podría ser una donación del euskera al castellano.
Algunos apellidos se reconocen en España y por toda América Latina que proceden del euskera, tales como Madariaga (proviene de madari, pera en euskera), Izaguirre o Yzaguirre o Isaguirre (lugar expuesto al viento), Alberdi (pizarral), Ugarte o Huarte (entre ríos), Garay o Garai (alto), Mendizabal (monte ancho)….
Un ejemplo sería aizcolari, palabra que tiene su origen en el vocablo euskaldun aizkolari y que sirve para nombrar a deportistas que cortan troncos con hacha, una afición muy extendida en el País Vasco.
Pelotari (deportista que juega a la pelota en el frontón); ikurriña (ikurrina en euskera), nombre por el que se denomina a la bandera vasca; o lendakari (lehendakari), como se conoce al jefe del gobierno de la Comunidad Autónoma del País Vasco, son de los vocablos que al no tener analogías en el castellano han pasado a utilizarse sin más adaptación.
Bacalao llegó al vasco desde el neerlandés medio cabbeliau, adoptando la forma bakailao y posteriormente al español.
Pues algunas palabras, según señalan especialistas deberían importarse al castellano, porque son utilizadas en un ambiente coloquial:
“Ahí va la hostia”, es una frase que se ha adaptado al español y es una coletilla euskera utilizada como interjección, la cual puede ser semejante a la expresión de sorpresa ¡vaya!.
Jatorra se utiliza para decir que alguien es simpático, campechano o buena gente.
Potear: Ir a tomar tragos, o ir de poteo.
Xirimiri es una llovizna constante, lluvia muy fina.
Las personas que disfrutan el fútbol quizás conozcan la palabra aupa, pues es un saludo coloquial que se utiliza para aclamar al equipo de Bilbao, Athletic Club: “Aupa Athletic”.
“El viernes estuvimos de gaupasa y estoy muerto de sueño”. ¿Se te ocurre cuál es el sinónimo? Pues fiesta.
“Esta noche nos vamos de txikitos”, dicen algunas personas cuando van a tomar un trago de vino servido en los bares del País Vasco.