En la vida hay momentos y rachas de mala suerte, y tal parece que Elon Musk, conflictivo personaje del mundo tecnológico, está pasando por una particularmente fuerte.

Podría decirse que todo empezó con su incursión en política al ofrecer su total apoyo al actual presidente estadounidense, el igualmente conflictivo Donald Trump, con quien ha ido cultivando una amistad tan profunda y especial que en ocasiones genera confusión y es motivo de burlas.

Es en este escenario que Musk se convierte no solo en aliado de Trump, sino en figura central de un gobierno que apenas lleva dos meses en acción y que ya ha puesto al mundo patas arriba de manera irremediable.

Musk es figura central a través de DOGE, el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental, y para nadie es secreto que su peculiar visión de las cosas y el mundo ya ha causado estragos a más de un nivel.

Algo que Musk no parecía estarse esperando es que ocupar esa posición traería consigo sus propios estragos a las compañías que tiene a su cargo, siendo la más golpeada de ellas Tesla hasta nuevo aviso.

Lo de Tesla es un tanto penoso, pues de ser el referente en vehículos eléctricos ha pasado a ser el hazmerreír, con ventas a la baja, acciones que no levantan cabeza, ataques físicos dirigidos a concesionarios y fallos que dan hasta risa por lo absurdos que son.

Uno de esos fallos tiene que ver con ese vehículo ultrafeo llamado Cybertruck, considerado inicialmente el epítome de la modernidad. Resulta que se utilizó el pegamento equivocado en el ensamblaje, lo que ha llevado a anunciarse una retirada que deja entredicho la calidad de Tesla y a más de uno rascándose la cabeza.

Musk está consciente de que Tesla no se está desempeñando nada bien, pero el asegura que todo estará bien. ¿Será verdad? Está por verse.

Es un hecho que la incursión en política ha afectado negativamente a Musk, pero desde antes de dar ese paso, era evidente que, tarde o temprano, las grietas se harían presentes en una estructura construida en base a ego e imposiciones exageradas.