¿Realmente funciona el enfoque antitecnología para relajarnos?

20-10-2021
Ciencia, Tecnología e Innovación
Ojalá, República Dominicana
Compartir:
Compartir:

Por años se nos ha venido advirtiendo de la dependencia que hemos creado hacia la tecnología, sobre todo aquella a la que le damos un uso personal y hasta íntimo. 

En esta época de redes sociales, aplicaciones y recursos online, lo más normal es ver restaurantes, cines, tiendas, oficinas, teatros y salas de espera en general llenas personas absortas en sus pantallas.

A la hora de socializar con la pareja o con los amigos, el smartphone es un invitado muchas veces no deseado, interrumpiendo el flujo de las interacciones con el incesante tintineo de las notificaciones de WhatsApp, Instagram y demás plataformas. 

La cosa ha llegado a un punto tal que el smartphone hasta sirve para poner temas de conversación cuando esta se estanca, y ni hablar del selfie obligatorio que muchas veces no permite disfrutar del ambiente o de la actividad en que se participa. 

El smartphone lo usamos para todo, pero no es la única pieza de tecnología que nos acompaña. Aquí también caben los relojes inteligentes y los brazaletes fitness, que llevan cuenta hasta de qué tan mal dormimos, culpa -muchas veces- de la misma tecnología. 

¿Cómo limitar el uso de smartphones y demás cuando una cantidad considerable de usuarios alega sentir ansiedad cuando no anda con su teléfono?

Podrá parecer una exageración, pero este fenómeno hasta tiene un nombre: se llama nomofobia y se combina con otro curioso síndrome conocido como “FOMO”, las siglas de “Fear of Missing Out” o miedo a perderse de algo. 

Absurdo, ¿no es así? Desafortunadamente, es a este nivel que estamos, y por mucho que se habla y se aconseja, la gente sigue su camino, dependiendo cada vez más de estas cosas.

Para ayudar con esta ansiedad, y de paso tratando de reducir este nivel de dependencia, han salido algunas soluciones curiosas al mercado. La más reciente de ellas, aún en campaña en Kickstarter, es un reloj que no es un reloj. 

Se trata de Prompt, un accesorio para la muñeca que tiene la forma de un reloj pero que carece de manos, horas, segundos o cualquier cosa en la esfera. Si queremos saber la hora, este dispositivo vibrará para ofrecer una aproximación: una sola vibración significa que se está en el primer cuarto de hora, y así sucesivamente. Luces LED también ofrecen una aproximación. 

Prompt no ofrece ningún tipo de conectividad tampoco, siendo la idea que la gente no esté tan pendiente de la hora y las notificaciones. En ese sentido se parece bastante a NoPhone, un pedazo rectangular de plástico que ofrece lA sensación de tener un teléfono en las manos sin llegar a serlo. 

Similar a Prompt, NoPhone tiene el objetivo de reducir la ansiedad de la gente que anda sin su teléfono. 

Luce curioso e interesante a la vez, ¿pero funciona este enfoque? A juzgar por la cantidad de gente que vemos perdida en su tecnología, no parece tener el gran impacto.