Las chefs se quejan: «No existimos»
Solo un 10 por ciento aproximadamente de los restaurantes españoles distinguidos con algún reconocimiento de alta cocina están liderados por mujeres, una paradoja incomprensible para la presidenta de la Asociación Mujeres en Gastronomía, María José San Román: «Mientras que en la cocina familiar la mujer es la que prima, parece que no exista en la alta cocina».
San Román señala que no tiene explicación esa desproporción entre hombres y mujeres con reconocimiento gastronómico, por lo que visibilizar el papel de la mujer como chef, un género que no recibió ninguna de las 34 estrellas que se otorgaron en la pasada edición de la Guía Michelín, es el principal objetivo de la asociación que preside. «Solo con estar y existir ya es importante», asegura.
Afirma que el 85 % de la comida en España «la hacen las mujeres» y que, según datos de Hostelería de España de 2021, un 40 % de establecimientos de hostelería están dirigidos por mujeres, pero es mucho menos el porcentaje femenino que consigue reconocimiento.
En este sentido, resalta que hace falta denunciar cada día esta situación para que las entidades que contribuyen a esa falta de visibilidad de la mujer «se pongan las pilas» y «busquen» el talento, tanto masculino como el femenino: «La discriminación solo empobrece y no solo eso, sino que los más pequeños también necesitan ídolos femeninos».
San Román, responsable del restaurante Monastrell, de Alicante, indica que «los que quedan mal» son aquellos que dejan de lado a la mujer y augura una mejora de la situación en el futuro porque nadie se hacía esta reflexión hace cinco años pero «ahora todo el mundo se ha dado cuenta».
En la misma línea se expresa la cocinera y asesora gastronómica Rocío Riquelme, delegada de MEG en la Comunitat Valenciana. Su objetivo es claro y no es otro que reivindicar que «el talento no tiene género».
Riquelme expone que, en cuanto a reconocimiento, «es como si la alta cocina estuviera totalmente masculinizada»,
La alicantina sostiene que su trabajo como asesora gastronómica le ha permitido difundir por restaurantes de la Comunitat el proyecto de la asociación, que no está formada solo por mujeres, ya que «necesitamos el apoyo de todos, de mujeres, hombres, periodistas, empresarios o sumilleres».
Resalta que desde un tiempo a esta parte, se ven «más oportunidades hacia las mujeres», bien sea al salir de las escuelas de gastronomía, bien con mejores prácticas.
Cae por su propio peso
San Román, como Riquelme, también es optimista: «Como no hemos tenido pasado, seguro que tenemos futuro», resalta la chef alicantina, al tiempo que subraya que la gastronomía siempre ha sido de las mujeres, ya que fueron ellas «las transmisoras de los conocimientos», en una reivindicación que «cae por su propio peso».
Con estas acciones, San Román trata de otorgar a la mujer el poder que merece en la alta cocina: «Está mal visto que una mujer presuma o se dé importancia, pero suena viejuno» ya ver un cartel de premiados con solo hombres.