El reciclaje de personas y la multifuncionalidad, es el enemigo silente de la clase política dominicana. De toda, desde quienes usan distintos colores de las causas a las que pertenecen y que parecieran tener dueños, como de quienes tienen partidos más sólidos y de tradición.
La escuela debe de ser un lugar seguro para nuestros hijos e hijas, ningún docente de menores es amigo de sus estudiantes, ni debe de comportarse de manera inapropiada.
Jamás se ocuparon de alfabetizar, a pesar de recibir el dinero para tales fines, se han dedicado a buscan artilugios para privatizar bienes o tierras del Estado, como pasa con las propuestas de fideicomisos para Punta Catalina y Pedernales.
Las mujeres no podemos permitir que la crítica se vaya por el camino incorrecto, la lucha por el poder es fuerte, pero tampoco debemos otorgarle licencia para caer en machismos rancios y fuera de época.
En la gestión de Danilo Medina cuando se construyeron 17,279 aulas y se contrataron 31,845 docentes en OCHO AÑOS.
En dos años del PRM, en menos de 300 aulas entregadas han contratado 24,812 docentes.
Somos las personas que encabezan los chistes que normalizan que nuestro diario vivir es joder, mientras el otro grupo de personas que nos acompañan pueden dedicarse a emborracharse y descuidar sus responsabilidades, sin que eso sea “joder”, a pesar de que así joden hasta familias.