El actual Gobierno del PRM, encabezado por Luis Abinader, ha arruinado a productores nacionales de cerdo, quienes reportan más de 6 mil millones de pesos en perdidas, por importaciones, descuido fitosanitario y otras políticas desacertadas.

De esta manera lo plantea el experto agropecuario, Winston Marte, quien indica que, en el 2019, el país producía más de 80 mil toneladas métricas de carne de cerdo, lo que representó 65% de toda la carne consumida en el país.

“Esa cifra, en el Gobierno de Abinader, se ha reducido a menos de 40 mil toneladas métricas, equivalente a menos del 25% de todo el consumo de carne de cerdo en el país”, precisó el miembro del equipo técnico agropecuario del candidato presidencial Abel Martínez.

Deploró que este 2023, las importaciones de cerdo registran 130 mil toneladas, 87 mil toneladas más que 2019. Concluyó que el resultado es productores quebrados y una República Dominicana dependiente de lechones importados y a altos precios.

El especialista agropecuario del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) recordó que, a su llegada al Palacio Nacional, el Gobierno del PRM, canceló los técnicos especializados que protegían las fronteras dominicanas de plagas y enfermedades, lo que provocó la entrada de la Peste Porcina Africana (PPA).

Winston Marte señaló que la infraestructura para producir cerdos, que supera los mil millones de pesos, hoy está abandonada, lo que representa otra fuente más de pérdidas para los productores.

En ese mismo sentido, detalló que la producción de cerdos generaba una cadena de valor que permitía el desarrollo de más de 12,600 micronegocios, conocidos como frituras, cuyo principal producto era la carne de cerdo.

“El colapso de la producción ha provocado la desaparición de miles de frituras y empleos vinculados al transporte, producción y comercio de esa carne”, añadió el experto, con PhD en Ciencias Agrícolas, especializado en Economía Agraria.

“En resumen, Abinader arruinó la producción de cerdos y las familias dominicanas comen menos esta carne, debido a los altos precios. Es decir, se trata de una política errada que sólo permite ganancias a unos pocos empresarios importadores”, declaró.