Frida Kahlo, cuyo nombre completo era Magdalena Carmen Frida, nació en Coyoacán (Ciudad de México) el 6 de julio de 1907; La icónica artista falleció el 13 de julio de 1954.

Frida se erigió, entre otras cosas, por ser una voz que no callaba ante las injusticias. En el aspecto social, se manifestó activamente contra la injusticia social y a favor de los derechos de los trabajadores.

Gran parte de sus autorretratos y óleos están inspirados en los famosos retablos de la cultura del catolicismo popular mexicano y fueron claves para expresar los agradecimientos que la gente hacía a santos y santas por haberles hecho un milagro.

También tuvo incidencia en la política, ya que era evidente su compromiso con el Partido Comunista y su apoyo internacional a causas que ella consideraba justas y revolucionarias, siendo una de las gestoras para el asilo político de León Trotsky en México.

El legado que dejó la pintora se entiende más allá de su obra ya que fue trasgresora de todos los moldes sexuales, de género, corporales y culturales. En la imagen, aparece junto a otra referente cultural como lo fue Chavela Vargas.

También se convirtió en una exponente de la cultura ancestral de su país. Ya sea que estuviera en París, Nueva York o Coyoacán, Frida siempre vistió con el elaborado traje típico tehuano de las indígenas doncellas.