Países africanos exigen mayor ayuda global ante Naciones Unidas
Mandatarios de países africanos abogaron este jueves por reforzar la lucha por la seguridad internacional y regional, el desarrollo sostenible, así como el enfrentamiento al cambio climático durante el 77° período de sesiones de la Asamblea General de la ONU.
El presidente de Botsuana, Mokgweetsi Eric Keabetswe Masisi, afirmó que los retos globales requieren de soluciones transformadoras, las cuales, aseguró, estaban en los actuales marcos multilaterales.
Al mismo tiempo, recordó que su país cuenta con la mayor reserva de diamante del mundo, la que ha sido utilizada en pos del desarrollo sostenible a través de una visión holística.
No obstante, el jefe de Estado enfatizó en la necesidad de diversificar la economía mediante la inversión extranjera mientras recalcó que el poder y las oportunidades deben compartirse ampliamente a nivel internacional.
Por su parte, el presidente de Níger, Mohamed Bazoum, resaltó la importancia de luchar contra el cambio climático al haber “grandes puntos de inflexión y cambios casi ya irreversibles” en la situación medioambiental internacional.
En este sentido, recalcó que como consecuencia de ello el continente africano se ve expuesto a una agravación de la situación alimentaria, el desplazamiento de sus poblaciones, las severas sequías y la escasez de agua.
A su vez, el mandatario de Gambia, Adama Barrow, precisó en cuanto a las catástrofes naturales, que cada día se necesitan más ayuda y sin embargo “los esfuerzos globales parecen ser cada vez menos efectivos”.
De igual forma, subrayó que el conflicto en Ucrania ha impactado negativamente en las economías africanas con el aumento de la inflación, la inseguridad alimentaria y energética, lo cual “ha frustrado la recuperación de la pandemia”.
A partir de ello, ratificó que su continente pide “paz global y relaciones amistosas”, entretanto, llamó a Ucrania y a Rusia a poner un alto al fuego, así como resolver las contradicciones a través del diálogo.
Por otro lado, el presidente de Yemen, Rashad Mohammed Al-Alimi, destacó el crecimiento de las milicias armadas en su país, lo cual representa un riesgo transnacional y que atenta contra los derechos refrendados en la ONU hace más de 70 años.
En consonancia, resaltó que “no podemos seguir aceptando que una milicia armada ostente el monopolio del poder (…) el pueblo yemení tiene derecho a la paz y la estabilidad como el resto de los pueblos del mundo”.
El mandatario de Zimbabue, Emmerson Dambudzo Mnangagwa, expresó que conseguir los objetivos de la Agenda 2030 “sigue siendo una prioridad para todos nosotros” mientras llamó a los países desarrollados a ejecutar acciones concretas contra los efectos del cambio climático.
Asimismo, recalcó las medidas llevadas a cabo por su gobierno en pos de la paridad de género con la creación de centros para integrar los problemas que afrontan las mujeres jóvenes en el país africano.
Posteriormente, el presidente de Guinea-Bissau, Úmaro Sissoco Embaló, aseguró que la pandemia recordó que el valor de la vida de las personas, por lo que es oportuno “dotarnos del conocimiento científico, compartirlo y crear un acceso equitativo a las vacunas”.
Por su parte, el presidente de la Unión de las Comoras, Azali Assoumani, indicó que la prevención de los conflictos es el único medio para lograr que se resuelvan, y ponderó el rol del dialogo y la diplomacia como garantes de paz en el mundo.
Reconoció el valor de la ONU en el seguimiento a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las labores de prevención que impulsa para mitigar el cambio climático, donde muchos países se ven afectados por lluvias, inundaciones, incendios y otras catástrofes.
A su vez, el jefe de Estado de Liberia, George Manneh Weah, se comprometió a trabajar con la ONU para impulsar las alianzas, lograr la paz, el desarrollo internacional y la distribución equitativa de los bienes.
Destacó que su Gobierno inició un programa de empoderamiento económico de la juventud en riesgo, con la convicción de que cuando se empoderen los jóvenes, se convertirán en una fuerza positiva para el bien del país.
La intervención del presidente de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud, se centró en que la pandemia de la Covid-19 mostró cuán poco preparado estaba el mundo para esos embates, dejando claras las diferencias a la hora de solventar crisis.
El mandatario reflexionó sobre cómo los países desarrollados pudieron atender a sus ciudadanos con vacunas, pero otros debieron esperar a recibir donativos de otras naciones.
El presidente de Burundi, Evariste Ndayishimiye, destacó que con motivo de los desplazamientos, su país ha acogido a numerosas etnias y comunidades provenientes de la República Democrática del Congo, por lo que no nos se desentiende del objetivo de la paz.
Instó a la comunidad internacional a ofrecer socorro al pueblo congoleño, a la vez que solicitó colaboración de la ONU para detener las acciones terroristas que tienen lugar en esa región.
El presidente del Consejo Soberano de Transición de la República del Sudán, Abdel-Fattah AlBurhan Abdelrahman Al-Burhan, precisó que se trabaja en aras de mantener la paz interna, a la vez que lucha contra el flagelo de la delincuencia organizada.
Presentó un plan estratégico que Sudán ha adoptado en aras de disminuir la pobreza entre 2021-2023; pero solicitó aliados en el ámbito del desarrollo para trabajar de conjunto, a la vez que aseguró que la deuda externa constituye un obstáculo para el desarrollo social y económico del país.