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Cada 21 de marzo, se celebra el Día Internacional de los Bosques, fecha que coincide con la entrada de la primavera en el hemisferio boreal y con la del otoño en el austral.

Para este 2021, el lema es: Restauración forestal: un camino a la recuperación y al bienestar.

Los bosques representan el pulmón de toda la Tierra. Actualmente, comprende un tercio de la superficie terrestre. En ellos, viven una gran variedad de especies vegetales y animales, que forman parte del equilibrio natural de todo el ecosistema que habita la Tierra.

Alrededor de 1,600 millones de personas dependen directamente de los bosques para sobrevivir, proporcionándoles alimento, energía, medicina y abrigo.

República Dominicana, ejemplo de recuperación de bosques

De 2012 a 2020, el gobierno de Danilo Medina ejecutó Reforestemos Quisqueya, la más ambiciosa iniciativa de reforestación lanzada por gobierno alguno en nuestro país. 

Se sustentó en una comprensión rigurosa de los procesos que condujeron a lo largo de nuestra historia a la depredación de ríos y montañas, de apropiación y concentración de las mejores tierras por poderosos jefes políticos, militares, terratenientes y hacendados.

El gobierno de Danilo Medina cambió la visión que criminalizaba el fenómeno, por uno humanista y desarrollista que integra la necesidad de sobrevivencia de los campesinos con la protección de ríos y montañas.

Reverdecer las montañas sembrando agua buena, fue el leitmotiv.

Así logramos cambiar el modelo de producción que arrinconaba a nuestros campesinos en el conuquismo y la sobrevivencia. 

Exactamente 12,367 familias se integraron a los 7 proyectos, recibiendo un pago mensual para que mientras reverdecían sus tierras y las ponía a producir, pudieran vivir dignamente.

A julio de 2020, los proyectos de Desarrollo Agroforestal sembraron más de 68.16 millones (68, 168,548) de plantas, para un total de 601,529.62 tareas (Ta) intervenidas; de las cuales, 311,061.91 corresponden al componente forestal, a través de la incorporación de más de veinte (20) especies forestales; y otras 290,467.71 Ta al componente agrícola como café; aguacate; cacao y mango. 

Con esta intervención se beneficiaron 13,829 productores.

Este programa fomentó la generación de empleos directos, a través de la conformación de brigadas forestales y/o agrícolas.  6,481 personas recibieron el incentivo mensual, y más de 2,500 brigadistas forestales y agrícolas estuvieron involucrados.

Todos los beneficiarios (con o sin incentivo), recibieron el paquete tecnológico de siembra de plantaciones forestales, agrícolas, seguimiento técnico y entrega de insumos para las plantaciones.

El gobierno de Danilo Medina fomentó el fortalecimiento y la formalización de las cooperativas establecidas en el territorio de los proyectos; recibieron talleres de reeducación y fortalecimiento de cooperativismo básico y economía social y solidaria. 

De 18 cooperativas, 13 fueron debidamente formalizadas e incorporadas.

Se desarrolló un ambicioso plan de capacitación con temas relativos al desarrollo integral en el orden social, medio ambiental y económico de las comunidades de alta montaña.

Esto conllevó a que, en fecha 3 de abril del 2018, se entregara el Centro de Capacitación Agrícola y Forestal en Bohechío, provincia San Juan. 

En este recinto de enseñanza se traspasa todo el conocimiento requerido para las disciplinas que confluyen en los proyectos.

Fueron impartidos 322 eventos de capacitación beneficiando a 12,594 personas (productores y técnicos), en temas como: reforzamiento de conocimientos sobre los PDA y manejo de los cultivos: café, aguacate y cacao; importancia de las áreas protegidas; Manejo de GPS y georreferenciación; manejo de conflictos y organización comunitaria; técnicas para la reforestación; tecnología e innovación del cultivo cacao, entre otros.

A través de la Comisión Permanente de Titulación de Terrenos del Estado (CPTTE), se fomentó la formalización de la tenencia de tierra, a fin de dar solución definitiva al problema que representa la falta de titulación y/o registro de propiedad para los pequeños productores, dándoles acceso directo al crédito formal, a la seguridad jurídica de la tenencia de sus tierras y aumentar así, el valor de sus propiedades.

La ejecución de los Proyectos Agroforestales fueron un verdadero ejercicio de democracia participativa, tal y como lo establece el objetivo general 1.3 del eje 1 de la Estrategia Nacional de Desarrollo (Ley 1-12), así como el artículo 15 de la misma.

En cada proyecto se establecieron los Comités Locales de Coordinación y Ejecución, conformados por todos los actores relevantes de las comunidades beneficiadas y a los representantes de todos los grupos organizados constituidos como veedores de todos los procesos y con participación en el nivel de toma de decisión.

Estos proyectos eran ambientalmente sostenibles, en consonancia con el artículo 13 de la ley 1-12 y con el artículo 5 de la ley 64-00 de Medio Ambiente y Recursos Naturales. 

Con la reforestación en las cuencas hidrográficas altas, se inició la restauración los ecosistemas alterados.

Con las unidades agroforestales establecidas en las cuencas hidrográficas medias, mediante un modelo económico ambientalmente sostenible y con valores agregados a la producción, se propició la recuperación de la calidad ambiental, mejores condiciones de producción, a fin de que el productor pudiera insertarse de manera más competitiva en el mercado nacional e internacional tomando en cuenta los tres pilares del desarrollo sostenible.

Nuestro país, la República Dominicana, es ejemplo de recuperación de bosques, lomas y cuencas hidrográficas, de la mano con el desarrollo de las poblaciones locales, de la producción de alimentos, protección al medio ambiente y creación de riquezas de forma sostenible.

Puedes conocer más sobre Reforestemos Quisqueya en este enlace: https://gobiernodanilomedina.do/plan-de-gobierno/reforestemos-quisqueya