Las comisiones medioambientales de ambas cámaras legislativas en República Dominicana brillan por su silencio. En Barahona sigue la explotación minera y nadie sabe lo que está haciendo la empresa Belfond. Vuelve a sonar el proyecto de modificar los límites del Parque Nacional de Los Haitises.

Los enunciados del párrafo anterior son apenas algunos de los graves problemas medioambientales que tiene el país. Los denunció la destacada bióloga Ángela Guerrero, para quien la mala gestión del Gobierno propicia el caos y la irreparable pérdida de nuestros recursos naturales.

“No nos oponemos al desarrollo económico del país, nos oponemos al desarrollo que no es sostenible. Pertenecemos a acuerdos internacionales de desarrollo sostenible. No es nada nuevo, es una política que el país ha acogido”, expresó la defensora ambiental.

Al participar en el Matutino de La 91.3 fm, Guerrero lamentó que en República Dominicana se viole el mecanismo de visualización de los proyectos de explotación, como lo ordenan las normativas que rigen el medioambiente y la minería.

“Todos esos proyectos que impliquen el consumo de los recursos naturales deben ser sometidos a vistas públicas. En la nueva ley, los plazos de las nuevas concesiones se reducían, pero vemos que no. Sigue siendo 75 años para la explotación. Una concesión de 75 años no nos deja ni el hueco. Eso es lo que está durando la Belfond Enterprise”, comentó.

La bióloga denunció que en el caso de la minera Gold Quest, que pretende establecer una explotación de minerales en el Valle de San Juan, ni la empresa y las autoridades se han dignado a conversar con las comunidades.

“No hay un manejo transparente de la información. La gente se está llevando palos acechados, está incómoda. Vieron que la única forma de librarse de la presa de cola de la Barrick en Cuance fue a mediante la marcha gigantesca”, señaló la especialista.

Recordó que la minera Barrick Gold tiene que proveer agua potable a las comunidades, porque la del río está contaminado. Igual de grave, agregó, es que los campesinos no sean trasladados, que es lo que demandan, que les busquen otra alternativa de vida, porque no pueden cultivar cacao ni tener animales.

“Aquí no se visibiliza los problemas que tienen esas comunidades. Se llevan pedazos de la patria por cheles en Pedernales. Los datos de la caliza en general, según datos del propio Ministerio de Minería, indican que ocho años de extracción le habían generado ganancias al Estado de ocho millones de dólares. ¡Esos son cheles!”, sentenció.