
Administración Trump abrirá bosques vírgenes a la minería y la tala
El Departamento de Agricultura de EE.UU. rescindirá una política instaurada durante la presidencia de Clinton que prohibía la tala, la construcción de caminos y la minería en bosques no desarrollados, con el fin de gestionar mejor estos terrenos ante los riesgos de incendios, según anunció la agencia este lunes, una medida que ha encontrado la oposición de grupos ambientalistas.
El cambio permitirá que cerca de 59 millones de acres (23,9 millones de hectáreas) de bosques federales sean gestionados de manera más eficaz frente al riesgo de incendios, indicó el USDA.
Esta decisión está en línea con el objetivo del presidente Donald Trump de eliminar regulaciones medioambientales que, según él, suponen obstáculos para la industria.
La secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, anunció la derogación de la Roadless Rule de 2001 durante su intervención en la reunión de la Asociación de Gobernadores del Oeste celebrada en Santa Fe.
«Tras la derogación de esta norma, vamos a volver a una gestión forestal de sentido común para asegurar que nuestros bosques sigan existiendo para las generaciones futuras», declaró Rollins durante una rueda de prensa en el encuentro.
El Servicio Forestal de EE.UU. es una división del Departamento de Agricultura. Según el USDA, la Roadless Rule afecta aproximadamente al 30% de las tierras gestionadas por el Servicio Forestal.
No es la primera vez que Trump intenta revertir esta política. En 2020, su administración eximió al bosque de Tongass en Alaska de la Roadless Rule, una decisión que fue revertida por el presidente Joe Biden en 2023. El Tongass es el mayor bosque nacional de EE.UU.
El USDA afirmó que la medida permitirá que la gestión de los bosques se realice a nivel local. Aproximadamente el 60% de los bosques en estados como Utah y Montana tienen restricciones para el desarrollo de caminos debido a la Roadless Rule, según la agencia.
«Esta norma equivocada prohíbe al Servicio Forestal aclarar y cortar árboles para prevenir incendios forestales», sostuvo Rollins en su intervención, añadiendo que, desde la implementación de la norma hace 30 años, la media anual de superficie forestal quemada en EE.UU. se ha duplicado.
La gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, refutó la afirmación de Rollins de que la Roadless Rule es la responsable del aumento en la superficie incendiada durante las últimas tres décadas.
«El cambio climático es el mayor problema en la acumulación de combustible y estos incendios devastadores», señaló Lujan Grisham ante los gobernadores occidentales, recibiendo aplausos del público.
El grupo ambientalista Earthjustice criticó la medida, argumentando que los incendios forestales son más propensos a iniciarse en paisajes que cuentan con caminos.
«La Roadless Rule ha protegido durante más de una generación 58 millones de acres de nuestros bosques nacionales más salvajes del desmonte indiscriminado. Ahora, la administración Trump quiere eliminar estas protecciones para que la industria maderera obtenga enormes beneficios de la tala sin restricciones», afirmó Drew Caputo, vicepresidente de litigios para tierras, vida silvestre y océanos de Earthjustice.
«Estas tierras pertenecen a todos los estadounidenses, no a la industria maderera.»