El informe oficial de la Conferencia Episcopal Española sobre abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica desborda incongruencias, datos manipulados y verdades negadas. El documento, que fue presentado a bombo y platillo en diciembre pasado, excluye más de 300 casos notificados por las propias diócesis.

Según se desprende de una investigación publicada este lunes por El País, el informe titulado Para dar luz incluye una lista de 806 casos de pederastia conocidos, de forma tal que deja fuera al menos 325 denuncias que habían sido previamente comunicadas por órdenes y diócesis al Defensor del Pueblo.

El asunto va más allá. De acuerdo a lo conocido este lunes, el número de denuncias excluidas por la Conferencia Episcopal se eleva a 654 si se cotejan estas cifras con las incluidas en la base de datos de El País sobre clérigos acusados de abusos sexuales, donde figuran en total 1.460 con al menos 2.608 víctimas.

También se aprecian manipulaciones en torno a las cifras reales de víctimas. En su informe oficial, los obispos se limitan a citar los datos correspondientes a un cálculo elaborado a fecha de junio de 2023, cuando situó el número de víctimas en 927. Sin embargo, las órdenes y diócesis notificaron al Defensor del Pueblo la existencia de al menos 1.385 víctimas.

Sin datos de los Maristas

La investigación revela que el informe de la Conferencia Episcopal deja fuera a los maristas, algo totalmente incomprensible a la luz de los datos: se trata de la segunda congregación con mayor número de denuncias, sólo superada por los jesuitas.

Tampoco figuran varios casos de amplia repercusión pública, como el registrado en el colegio San José de los menesianos de Bermeo entre los años setenta y ochenta, sobre el que informó la Televisión Pública Vasca en 2022.