Este 24 de enero se celebra el Día Internacional de la Educación, fecha proclamada por la ONU con el objetivo de promover y concienciar a la población sobre la importancia de la educación para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

El Objetivo número 4 se denomina «Educación de Calidad» y establece que hay que garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, promoviendo oportunidades de aprendizaje durante toda la vida y para toda la población, independientemente del género, religión, etnia, orientación sexual o cualquier otra razón.

En base a los ODS, este objetivo tendría que cumplirse no más tarde del año 2030. Sin embargo, a pesar de que hay muchos datos positivos, como el hecho de que la matriculación en la enseñanza primaria en los países en desarrollo alcanza el 91%, queda aún un largo camino por recorrer; camino que, además, ha quedado alargado debido a la actual pandemia.

Algunos datos que indican la necesidad de aumentar el esfuerzo a nivel internacional en esta materia son

57 millones de niños en edad de escolarización primaria siguen sin asistir a la escuela. Más de la mitad de los niños que no están escolarizados viven en el África Subsahariana. Cerca del 50% de los niños que no asisten a la escuela primaria viven en zonas afectadas por conflictos. 617 millones de jóvenes en el mundo se encuentran actualmente sin alfabetizar.

La educación constituye una base fundamental para crear sociedades justas e igualitaria, influyendo en la calidad de vida de las personas y combatiendo lacras como la pobreza, el machismo, la homofobia o la desigualdad en todos los ámbitos.