Se amplifica el choque chino

18-05-2022
Economía y empleos
Jaime Aristy Escuder Blog, República Dominicana
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En el año 2014, el presidente chino Xi Jinping, señaló: “El crecimiento de la economía china es una importante fuerza motriz del crecimiento de la economía mundial.” Hoy, ocho años después, esa afirmación se ratifica.  

La decisión de imponer una férrea cuarentena y limitar la actividad económica a 26 millones de personas en Shanghái, la mayor ciudad de China, con la justificación de enfrentar la propagación del covid-19, ha debilitado el crecimiento económico de la segunda economía del mundo. La producción industrial cayó en 2.9% en abril con relación al mismo mes del año anterior, subiendo la tasa de desocupación a 6.1%, su nivel más elevado desde febrero de 2020 cuando alcanzó 6.2%. El consumo privado también descendió, manifestándose en una contracción interanual de 11.1% de las ventas al por menor. De acuerdo con el Wall Street Journal, Citigroup proyecta que el crecimiento económico chino será de apenas 4.2%.

La cuarentena aplicada por las autoridades chinas ha acentuado la disrupción de la cadena de suministro y ha reducido el abastecimiento de productos a nivel mundial, repercutiendo negativamente sobre las empresas en países avanzados y en desarrollo. Ese nuevo choque de oferta tiende a elevar los precios y a reducir la actividad económica en esas naciones. Los mercados bursátiles reaccionaron negativamente. En el caso de los Estados Unidos, el Nasdaq cayó 1.2%; el S&P 500 retrocedió 0.4%; y el Dow se mantuvo relativamente constante.

Para entender las decisiones tomadas por el gobierno chino hay que asistirse de las opiniones de expertos sobre ese gigante asiático. Lee Kuan Yew, padre de la patria de Singapur y forjador de su milagro económico, afirmó hace diez años que China tenía la intención de ser la potencia más grande del mundo. Y añadió que ese país tiene la capacidad de poner sanciones económicas simplemente negando el acceso a un mercado con una población superior a los 1,400 millones de personas. Lo que se ha demostrado en meses recientes, en función de las restricciones económicas establecidas en Shanghái, es que China no sólo puede poner sanciones o provocar un impacto negativo limitando el acceso a su mercado interior, sino limitando el acceso a su oferta de productos. En ese contexto, cabe destacar que la contraparte de la congestión de contenedores en ese puerto registrada durante varios meses fueron anaqueles vacíos en las tiendas del resto del mundo y, obviamente, mayores precios.