Por un buen mantenimiento de la infraestructura pública

21-11-2023
Economía y empleos
Jaime Aristy Escuder Blog, República Dominicana
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[Escrito el 20 de noviembre de 2023]

La tragedia ocurrida en el paso a desnivel de la avenida 27 de Febrero con avenida Máximo Gómez producto del fenómeno atmosférico que impactó el país el sábado 18 de noviembre es un llamado de atención a la sociedad dominicana sobre la importancia de que se ejecute un buen mantenimiento a la infraestructura pública. La seguridad de la población debe ser uno de los principales objetivos de todo gobierno y, por tanto, hay que adoptar medidas de conservación de la infraestructura para que tengan siempre un estado que minimice la ocurrencia de accidentes que cobren vidas humanas.

A lo largo del tiempo toda infraestructura pública sufre un deterioro de su utilidad y valor, proceso que se denomina depreciación. Ese deterioro, que ocurre a diferentes tasas en función del tipo de activo, reduce el aporte de la infraestructura al crecimiento económico. Por ese motivo es indispensable que se asignen recursos públicos para llevar a cabo dos tipos de mantenimiento que reducirán la tasa de depreciación: el mantenimiento del activo para extender su vida útil y capacidad; y el mantenimiento rutinario, que permite que la infraestructura opere eficientemente y con el grado de seguridad compatible con el bienestar de la gente.

Los políticos deben reconocer que es indispensable llevar a cabo un buen mantenimiento de la infraestructura pública. El primer paso debe ser asignar la misma importancia al corte de cinta que se lleva a cabo cuando se inaugura una obra de infraestructura que al mantenimiento que se realiza a la obra sin que los votantes vean ese trabajo. El segundo paso es fortalecer técnicamente a las instituciones encargadas de gestionar esas infraestructuras para que puedan levantar un inventario dinámico del estado de cada una de ellas, mediante el cual se determinaría el mantenimiento predictivo, preventivo y correctivo que debe ejecutarse. El tercer paso es asignar los recursos presupuestarios necesarios para ejecutar de forma continua y oportuna las actividades de conservación.

Autopistas, carreteras, avenidas, líneas de metro, puentes, puertos, aeropuertos, plantas de generación de electricidad, líneas de transmisión y distribución eléctrica, acueductos y presas, son solo algunas obras de infraestructura pública que deben recibir un buen mantenimiento. En ese contexto, se estima que la inversión anual en mantenimiento de infraestructura vial en la República Dominicana debe presupuestarse entre 0.25% y 0.3% del PIB, equivalente a un suma que oscila entre 300 y 350 millones de dólares. Aunque parezca elevado, hay que tomar en consideración que la posposición de ese tipo de inversión reduce su aporte al desarrollo económico y eleva la probabilidad de accidentes mortales, cuyo costo para la familia tiende al infinito.