En tiempo de inflación es de suma importancia tomar decisiones financieras correctas: cuidar nuestra liquidez, controlar nuestros gastos y minimizar las deudas.

En las finanzas personales, el manejo del dinero es uno de los temas que más agobian y preocupan a las personas. De hecho, un alto porcentaje de los dominicanos se encuentran endeudados y agobiados por su situación financiera.

Sólo hay que saber que más del 60% de los empleados públicos y privados perciben un salario por debajo del valor de la canasta básicacalculada por el Banco Central mes por mes. Eso significa que la mayoría de las familias dominicanas no cuentan con ahorros o reservas para cubrir sus gastos mensuales, ni tampoco tienen un fondo de emergencia para imprevistos.

Los precios de los bienes y servicios siguen subiendo, y el poder adquisitivo de los salarios que perciben las personas disminuyen cada día, lo que hace que la relación financiera de ingresos menos gastos, sea más negativa cada mes, que conlleva a que las personas continúen endeudándose a tasas de interés elevadas, ya sea por la vía de la banca formal mediante el uso de las tarjetas de créditos, o con empresas no reguladas que se dedican a prestar dinero, o con prestamistas informales que como bien dicen ellos, “son los que sacan del apuro a la gente de a pie”.

En tiempo de inflación y a falta de dinero, es necesario contar con herramientas y estrategias para rendir el dinero, porque si no terminarás agobiado y altamente endeudado.

Qué hacer, paso a paso

Primero, debes empezar haciendo un presupuesto para visualizar y planear los gastos de cada mes antes de que este empiece.

Sin duda parecerá tedioso e innecesario al comienzo, pero te garantizo que sentirás que te aumentaron el sueldo si llevas a la práctica este ejercicio y evitarás fácilmente gastar más de lo que ganas cayendo o incrementando tus deudas.

Pasarás de no saber a dónde rayos va tu dinero a retomar el control y asignarle a cada uno de tus pesos una misión única y específica.

Un presupuesto escrito, ya sea en una hoja de Excel, un cuaderno o una servilleta pegada al refrigerador te permitirá visualizar rápidamente si puedes cubrir todos tus gastos corrientes del mes, cómo avanzan éstos y qué ajustes tienes que hacer entre tus prioridades para llegar a fin de mes sin apuros, o para saber con antelación cómo te vas a endeudar o cómo vas a conseguir el dinero para cubrir los gastos del mes.

Segundo ¡Debes revisar muy bien los gastos!

Por un lado, están los gastos fijos obligatorios, es decir, los que no suelen variar o lo hacen solo cada cierto tiempo, como la hipoteca, pago del alquiler de vivienda, pago de préstamo de vehículo, pago de colegiatura, entre otros. Estas partidas de gastos son muy difíciles de disminuir.

Por otro lado, están los gastos variables obligatorios como los suministros básicos de luz, agua y teléfono, la alimentación o la ropa. Estos, normalmente, no se pueden eliminar, pero sí es posible aminorar su peso en el presupuesto”. Por ejemplo, cambiando hábitos de alimentación, sustituyendo productos de marca por otros más económicos, aprovechando las ofertas que realizan los diferentes supermercados, o visitando los mercados de productores.

Adicionalmente, debes aplazar algunas decisiones de compras de ropa, vacaciones, viajes, y compras que no sean necesarias por el momento.

Tercero ¡Debes revisar tus niveles de deudas por acreedores y consolidarlo en un solo si es posible!

En el caso de que tengas varias deudas, puedes renegociar y consolidar estás deudas con una entidad bancaria de tu preferencia.

En el caso que tengas varias deudas de tarjetas de crédito, existen entidades bancarias que te ayudan a consolidar estas deudas en un préstamo personal con el beneficio financiero que pagarás menos intereses por esta consolidación.

Es importante en estos tiempos de inflación que puedas escoger la tarjeta de crédito que te ofrezca los mejores beneficios por los consumos que realizas. Esto, en términos de días para pagar, tasa de interés por financiamiento, devolución por consumos, entre otros beneficios.

Recuerda que, si no vas a pagar la totalidad de los consumos realizados en la tarjeta crédito en el mes, haz el esfuerzo de pagar lo más temprano que puedas, para que los intereses por financiamiento sean menores.