Actividad económica alcanza expansión acumulada de 5.6 % en enero-mayo de 2022, superior a su ritmo potencial
El Banco Central de la República Dominicana, en interés de mantener debidamente edificados a los agentes económicos y al público en general y como parte de su compromiso con la transparencia y la divulgación oportuna de datos, informa sobre los resultados de la economía dominicana a mayo de 2022.
El Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) registró un crecimiento interanual de 4.8 % en el mes de mayo, para una variación acumulada de 5.6 % durante los primeros cinco (5) meses de 2022 al compararse con igual período del 2021. El desempeño evidenciado por la economía dominicana en el presente año refleja su resiliencia y capacidad para mitigar el impacto de los factores adversos que prevalecen a nivel mundial, asociado principalmente a los conflictos geopolíticos y al notable incremento en los precios de las materias primas (commodities) especialmente petróleo y derivados, lo que se ha traducido en un choque de costos global, tal como reseñara recientemente el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su informe de la Consulta del Artículo IV (staff report) para República Dominicana.
En este sentido, ante la incertidumbre asociada al entorno internacional y la orientación de la política monetaria de la mayoría de los Bancos Centrales hacia la normalización de los niveles de liquidez para la estabilización del proceso inflacionario, las perspectivas de expansión de las economías se han tornado más conservadoras, revisando a la baja las proyecciones de crecimiento mundial de 4.4 % a 3.6 % de acuerdo a los últimos datos del FMI. De manera particular, Estados Unidos de América, principal socio comercial de República Dominicana, registró un crecimiento interanual de 3.5% en el PIB real del primer trimestre de 2022; mientras, si se mide la variación de esta variable en términos intertrimestral anualizado, mostró una caída de 1.6%. En este sentido, las previsiones de crecimiento de esta economía para 2022 igualmente fueron ajustadas pasando de 4.0% a 3.7%, conforme al más reciente panorama publicado por el FMI. A su vez, se están revisando las proyecciones del PIB para el cierre del presente año en los países de la Zona Euro a raíz del próximo cambio anunciado de una postura de política monetaria menos acomodaticia.
En el caso de la economía dominicana, las perspectivas se mantienen favorables, previéndose que se registre uno de los crecimientos del PIB más altos entre las economías emergentes y de la región para el cierre del año 2022, con una variación en torno a su potencial, lo que sería consistente con mayores flujos de inversión pública y privada en la segunda mitad del año.
Al analizar en detalle el comportamiento del IMAE, se destacan las siguientes actividades económicas por el incremento en su valor agregado durante el período enero-mayo de 2022: hoteles, bares y restaurantes (35.0 %), otras actividades de servicios (10.9 %), salud (9.4 %), transporte y almacenamiento (8.3 %), administración pública (8.0 %), manufactura de zonas francas (7.9 %), comercio (7.2 %), servicios financieros (6.5 %), entre otras.
Es importante destacar la expansión interanual de 35.0 % en el valor agregado de la actividad hoteles, bares y restaurantes al cierre de mayo de 2022, la cual responde fundamentalmente al aumento interanual de 102.2 % en la llegada de pasajeros no residentes en los primeros cinco meses del presente año. Este dinamismo se mantuvo durante el mes de junio cuando llegaron al país 644,861 turistas, logrando así acumular 3.5 millones de visitantes en el primer semestre de 2022, de acuerdo a los datos preliminares ofrecidos por el Ministerio de Turismo, representando aproximadamente US$4,000 millones de ingresos de divisas, lo que permite proyectar que para el año completo se estaría recibiendo más de US$8,000 millones por este concepto.
En este tenor, la recuperación del turismo se ha beneficiado de la implementación de políticas oportunas orientadas a fomentar la sostenibilidad de esta industria al garantizar la protección de los viajeros en el país ante la situación sanitaria relacionada con el COVID-19, así como por las estrategias de promoción en los potenciales mercados emisores y renovación de los destinos más atractivos en las diferentes provincias del país para continuar fortaleciendo el turismo interno y receptor.
Por otro lado, el aumento en el valor agregado en las actividades de comercio (7.2 %) y de transporte y almacenamiento (8.3 %) se encuentra estrechamente vinculado al dinamismo en la producción, distribución y comercialización de bienes agropecuarios y manufacturados de origen local e importado, así como por el notable flujo terrestre de pasajeros. Estas actividades en conjunto explican aproximadamente 26.4 % de la variación interanual de 5.6 % registrada por el IMAE de enero-mayo 2022.
En cuanto a las actividades de manufactura, el incremento de 7.9 % en las zonas francas está impulsado por la demanda externa de los bienes producidos por el sector, la cual al cierre de mayo de 2022 alcanzaba un monto acumulado de US$3,192.1 millones, para un crecimiento interanual de 12.7 %.
En relación a la manufactura local, esta actividad registró un aumento promedio de 4.7 % en su valor agregado real de enero-mayo de 2022 con respecto al mismo período del año anterior, asociado principalmente al comportamiento favorable de las actividades fabricación de sustancias y productos químicos, fabricación de metales comunes, elaboración de bebidas y derivados del tabaco. Este resultado se encuentra en línea con el indicador mensual de la actividad manufacturera (IMAM) que compila la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), el cual alcanzó un valor de 60.1 en el mes de mayo, superior al 56.9 de abril y por encima de 50.0, umbral a partir del cual se considera que la perspectiva del sector es positiva.
Cabe destacar que la expansión monetaria del Banco Central mediante la provisión de recursos al sistema financiero para que fueran canalizados a los agentes productivos a través de créditos a una tasa de interés máxima de 8 % fija a 3 años, sigue contribuyendo a través del mecanismo de transmisión al buen desempeño de las actividades económicas mencionadas precedentemente.
La actividad de intermediación financiera exhibió una variación interanual de 6.5 % en enero-mayo de 2022, incidiendo en este comportamiento la expansión interanual de 13.1 % del crédito otorgado al sector privado en moneda nacional al cierre de mayo de 2022. Cabe destacar que el financiamiento hacia el sector privado es un reflejo de la importante incidencia que tiene el mismo sobre el desempeño de la economía en su conjunto.
Adicionalmente, la actividad construcción aumentó 3.2 % en enero-mayo de 2022 en términos interanuales, resultado que estuvo influenciado por el aumento considerable del precio de los insumos de la construcción y por el efecto estadístico de la base de comparación, ya que en igual periodo de 2021 este sector registró una significativa expansión de 53.0 %. No obstante, el promedio del índice de volumen de la actividad construcción resulta ser un 17.0 % más alto que en enero-mayo 2019 (pre-pandemia) y su dinámica está sustentada en la ejecución de proyectos de desarrollo residenciales, industriales y turísticos de capital privado, así como por las importantes obras de ingeniería civil e infraestructura por parte del Gobierno.
En otro orden, durante el mes de mayo la actividad agropecuaria exhibe una expansión interanual de 5.7 %, acumulando un incremento anualizado de 2.4 % en los primeros cinco meses del año. Cabe resaltar que, a pesar de enfrentarse a un entorno desfavorable por subidas de precios de las materias primas en los mercados internacionales, el sector ha logrado mantener un rendimiento positivo gracias al oportuno apoyo técnico y financiero implementado por el Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura y sus dependencias, con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria nacional y procurar la estabilidad de precios de los rubros agropecuarios.
Por otro lado, la disminución de 17.6 % en la minería durante los primeros cinco meses del 2022 continúa reflejando un menor volumen de producción del oro y la plata dada la madurez actual de la mina de Pueblo Viejo. Resulta importante señalar que en la actualidad está en curso un proyecto de extensión de la vida útil de la referida mina hasta el año 2044, para lo cual solo se esperan los permisos correspondientes. Esto permitirá incrementar los niveles de extracción, así como el volumen de producción y exportación, lo que se traduciría en un aumento de los ingresos de divisas y las recaudaciones fiscales.
En cuanto al comportamiento de los precios en el ámbito doméstico, la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue de 0.49% en mayo de 2022 con respecto al mes de abril, situando la inflación interanual medida desde mayo de 2021 hasta mayo 2022 en 9.47%. Resulta importante destacar que, similar a lo ocurrido para demás economías del mundo, la dinámica reciente de la inflación continúa reflejando el impacto de choques externos más persistentes de lo previsto, asociados a las disrupciones en la cadena de suministros y al alza en las cotizaciones en los mercados internacionales de las materias primas que son insumos para la producción local, lo cual se ha exacerbado debido a la duración del conflicto Rusia-Ucrania. En adición, en los últimos meses se han comenzado a verificar presiones internas asociado a la notable recuperación de la demanda agregada con relación a los niveles previos a la pandemia y se ajustan las tarifas de diversos servicios de la economía.
En este contexto, el Banco Central de la República Dominicana mantiene el proceso de normalización monetaria, combinando medidas de control de liquidez con operaciones de mercado abierto e incrementos graduales en la tasa de política monetaria, las cuales han revertido la postura expansiva implementada durante la pandemia, para evitar riesgos que pudiesen profundizar las actuales presiones al alza de los precios domésticos, así como un deterioro del diferencial con respecto a las tasas de interés externas que pueda provocar volatilidad en el flujo de capitales. Estas medidas contribuyen a la convergencia de la inflación general al rango meta de 4.0 % ± 1.0 % en el año 2023, de acuerdo a lo proyectado por el FMI en el reporte de la Consulta del Artículo IV (staff report) del país.
En ese sentido, a partir de julio de 2022, se incrementó la tasa de interés de política monetaria en 75 puntos básicos, de 6.50 % anual a 7.25 % anual, para un aumento acumulado de 425 puntos básicos desde noviembre de 2021 hasta la fecha, para propiciar una reducción en las presiones inflacionarias. Asimismo, esta medida se ha combinado con las operaciones de mercado abierto para el retiro del excedente de liquidez y con el retorno de los recursos otorgados a los intermediarios financieros durante el período de la pandemia. Lo anterior a su vez ha logrado acelerar el mecanismo de transmisión de la política monetaria, contribuyendo al ajuste en las tasas de interés domésticas y a una moderación significativa en el crecimiento de los agregados monetarios.
Cabe destacar que, así como fue mencionado anteriormente, las economías avanzadas como Estados Unidos, Inglaterra, Canadá y próximamente la Zona Euro, también han adoptado una postura de normalización de la política monetaria. Igualmente, la mayoría de los bancos centrales de América Latina han realizado incrementos significativos en sus tasas de referencia con el propósito de contener las presiones sobre los precios y propiciar la convergencia de la inflación hacia los objetivos establecidos en los respectivos esquemas de política monetaria de cada país.
En cuanto al sector externo, el mismo continúa mostrando un desempeño favorable. Las exportaciones en el mes de mayo registraron un crecimiento de 10.5 %, unos US$111.9 millones adicionales a los observados en mayo de 2021, explicado en gran medida por el aumento de las exportaciones de zonas francas, que sumaron unos US$672.3 millones. Las actividades con mayor incidencia sobre el comportamiento de las zonas francas fueron la producción los equipos médicos, confecciones textiles y manufactura de tabaco. De igual forma, se destaca el crecimiento de las exportaciones nacionales, que totalizaron US$501.5 millones, unos US$46.4 millones más (10.2 %) que mayo de 2021. Por su lado, las remesas alcanzaron unos US$851.2 millones en mayo, por encima de su flujo promedio mensual histórico, proyectándose que al cierre del presente año se estarían recibiendo cerca de US$10,000 millones por este concepto.
En lo referente a las importaciones totales, estas registraron un valor en mayo de US$2,504.0 millones, un incremento interanual de US$550.0 millones (28.1 %). Dentro de este resultado, las importaciones no petroleras alcanzaron US$1,970.1 millones, exhibiendo un aumento de 17.6 %, acorde con el comportamiento de la demanda agregada. En cuanto a las importaciones petroleras, las mismas crecieron en 91.4 % respecto a mayo del 2021.
Las reservas internacionales se mantienen en niveles históricamente altos, en torno a los US$ 14,250 millones, equivalentes a 13.1 % del PIB y 5.9 meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI. Estos factores han favorecido la estabilidad relativa del tipo de cambio, reflejada en una apreciación acumulada de 4 % al cierre de mayo que, junto a las medidas adoptadas para la normalización monetaria, están contribuyendo a moderar las presiones inflacionarias de origen externo.
En cuanto al sistema financiero consolidado, al cierre del mes de mayo de 2022 la rentabilidad anualizada sobre el patrimonio (ROE) se ubicó en 21.7 %, mientras que la rentabilidad sobre los activos (ROA) fue de 2.5 %. Asimismo, el cociente de liquidez fue de 25.0 %, conforme la última información disponible a abril, y la morosidad de la cartera de créditos fue de 1.0 %, lo que evidencia que el sistema se mantiene estable, con adecuados niveles de solvencia, liquidez y rentabilidad, así como un bajo nivel de riesgo de su cartera crediticia. En el caso de la banca múltiple, la rentabilidad sobre el patrimonio (ROE) se ubicó en 24.2 %, y sobre los activos (ROA) en 2.5 %, con un coeficiente de solvencia de 15.6 % y de morosidad en 0.9 %.
Finalmente, los resultados descritos sustentan que la economía dominicana mantiene un ritmo favorable en cuanto a su desempeño, como muestra fehaciente de que posee fuertes fundamentos macroeconómicos, por lo que se encuentra en una buena posición para hacer frente a los retos del entorno internacional convulso que prevalece en la actualidad. En este sentido, tal como ha sido destacado por organismos internacionales, la economía dominicana ha de continuar en su trayectoria de recuperación, convergiendo hacia su tasa de crecimiento potencial.