Nuevo año, nuevo bombardeo tecnológico

10-01-2024
Ciencia, Tecnología e Innovación
Ojalá, República Dominicana
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Apenas comienza el año, y ya ni sabemos para donde mirar en términos de tecnología.
Podríamos echar la culpa al CES (Consumer Electronics Show), el evento que se celebra anualmente en Las Vegas y que suele marcar la pauta para el resto del año, pero la cosa más profunda.

Al ritmo al que avanza la tecnología es cada vez más rápido, y hace mucho que resulta imposible seguirle los pasos a la par.

CES, que inicia oficialmente este miércoles 9 de enero, es un reflejo de esta realidad. La cantidad de innovaciones, startups y propuestas que allí se ven es tan impresionante como inmanejable, resultando insuficientes los 4 días que dura el evento para explorarlo en su totalidad.

Aun dentro del inmenso bombardeo, algunas tendencias quedan claras, y es así como CES 2024 estará dominado en gran medida por inteligencia artificial en cada una de sus vertientes imaginables.

Inteligencia artificial es, igualmente, uno de los enfoques de Samsung para el evento Unpacked que tiene pautado para el 17 de enero, apenas cinco días después de la realización del CES.

En este Unpacked se estarán viendo las venideros Galaxy S, pero de antemano se ha hecho mucho hincapié en que estos smartphones estarán integrando de manera directa capacidades de inteligencia artificial que van más allá de la mejora en fotografía y video que por años se ha estado observando en estas cámaras.

Finalizado este Unpacked, sigue el festival de eventos tecnológicos de trascendencia. Fiel al calendario habitual que la pandemia amenazó con interrumpir de manera indefinida, la próxima cita de envergadura es Mobile World Congress (MWC) en Barcelona, España.

MWC se llevará a cabo a finales de febrero, y es tan solo el comienzo de una larga hilera de actividades tecnológicas que incluyen conferencias de desarrolladores, más lanzamientos de teléfonos, presentaciones de avances novedosos y un largo etcétera.

Como va la cosa, no bien hemos comprado nuestro más reciente teléfono cuando el mismo fabricante ya está presentando una versión mejorada o más completa, resultando la dinámica en un interminable ciclo de consumismo.

Caerle atrás a tanta tecnología representa un desafío doble. Por un lado, la rapidez de los avances impide dar un seguimiento óptimo; por el otro, no podemos ignorar tales avances porque de alguna forma u otra terminan incidiendo en nuestras vidas, con consecuencias insospechadas.

¿Quién pone el balance? Hasta ahora, nadie. Negocios son negocios, y la tecnología es tan negocio como cualquier otro. Si no lo creen así, basta ver la lucha de poder que se desató en OpenAI en noviembre pasado por cuestiones donde la ética y la prudencia competían con el afán de comercio y lucro.