La vida resurge en el fondo marino de La Palma afectado por la erupción: será un paraíso para bucear

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La lava del volcán que entró en erupción el 19 de septiembre de 2021bautizado como Tajogaite, destruyó todo a su paso en la tierra, pero también en el océano, un impacto en el ecosistema marino que casi un año después ha dado paso a la vida, como muestran las imágenes grabadas por los investigadores hace unos días en la zona donde la lava llegó hasta el agua.

Las características de la lava han ayudado a que eso ocurra. «Esa lava lleva consigo un importante aporte de nutrientes, especialmente hierro, que favorecen la recuperación de la zona siguiendo la evolución natural del sistema», ha explicado Melchor González, catedrático de Química Marina de la Universidad de Las Palmas de Gran Canarias (ULPGC).

La colada recorrió siete kilómetros en tierra que ayudó a que se disolviesen los gases tóxicos que hubieran provocado un desastre ecológico. Esto ha hecho que ahora se puedan ver algas y peces en el fondo del mar.

«Estamos viendo los primeros cardúmenes de viejas pequeñas creciendo dentro de estos deltas lávicos, lo mismo con los meros, como cabrillas también», asegura José Carlos Hernández, profesor de Biología Marina de la Universidad de La Laguna.

Foto: RTVE

Pesca prohibida para ayudar a la regeneración

La erupción y la llegada de la lava al mar llevó al límite a los pescadores del muelle de Tazacorte. Antes pescaban donde ahora está el delta lávico, una zona de exclusión. Ahora tienen que desplazarse más lejos, con el consiguiente gasto de combustible, lo que hace que a veces no les salga rentable salir a faenar. 

A día de hoy, casi un año después de una eupción que duró unos tres meses, la pesca está prohibida en la zona para que pueda regenerarse. La buena noticia es que la lava ha dado una oportunidad para que las especies puedan reconstruir su hogar.

«Va a ser un sitio excepcional desde el punto de vista de los recursos pesqueros, puesto que estos recursos pesqueros requieren de este hábitat rocoso para vivir, pero también desde el punto de vista socioeconómico«, asegura el profesor José Carlos Hernández.

Será un paraíso para bucear. Investigadores de las dos universidades públicas de Canarias no han parado de hacer seguimientos desde la erupción. Es la reconstrucción natural bajo el mar, que está siendo mas rápida que en la superficie.

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