De como unas grabaciones en vinilo impulsaron la salvaguarda de las ballenas
En 1967, el biólogo y ambientalista Roger Payne fue llamado por la armada norteamericana para que, mediante sus conocimientos en bioacústica (es decir, en la detección e interpretación de las ecolocalizaciones realizadas por animales como los murciélagos, los delfines y las musarañas), detectara la presencia de submarinos rusos.
Sin embargo, lo que Payne halló fue mucho más que el zumbido de las hélices de los vehículos de inmersión profunda, pues este se confundía con una insólita colección de melodías que, como posteriormente se descubrió, procedían de las ballenas.
Las grabaciones que Payne realizó recogían cientos de cantos complejos cuyo carácter variaba en función del grupo de ballenas que los emitía, lo que demostraba que existía algún tipo de transmisión cultural a través de la cual se transferían las vocalizaciones las unas a las otras, generación tras generación.
El impacto científico de las investigaciones del biólogo americano fue absoluto, arrojando luz a una cuestión que, hasta ese momento, se desconocía. Sin embargo, Payne consiguió algo mucho más importante.
Para aquel entonces, las poblaciones de cetáceos se encontraban drásticamente mermadas en consecuencia de la actividad de la industria ballenera y de la degradación de sus hábitats.
Poca era la gente que se opusiera a dicha persecución, y tampoco existían demasiados documentos gráficos e informativos que contribuyeran a la sensibilización de la población.
El escenario era terrible, las ballenas se encontraban en la senda de la desaparición y no existía ningún tipo de toma de conciencia. No obstante, una asombrosa serendipia provocaría un punto de inflexión. Payne decidió recopilar y publicar sus escuchas en distintos vinilos que se distribuyeron alrededor del mundo.
Con ello, consiguió dar voz a unas criaturas que tradicionalmente habían sido concebidas como mera fuente de aceite y de grasa. Sus melancólicos cantos se interpretaron como una petición de auxilio; y de esa petición floreció una incipiente conciencia común de amor y sensibilidad por estos colosos marinos.
1 día
Foto del perfil de evicaari
¡Interesantísimo! 👏Me parece un ejemplo muy claro de la importancia de dar a conocer a los animales con los que convivimos. 🥰 Al final, protegemos lo que conocemos, y aquello con lo que logramos empatizar de alguna manera.
Espacio pagado
Quienes habitamos la Comunidad Ojalá sabemos que somos diferentes y nos alegra serlo.
Nuestros contenidos son útiles para comprender y mejorar la vida cotidiana. Están libres de publicidad. Los anima la curiosidad, el rigor y los financia la gente.
Únete. Participa. Haz un donativo.