El coronavirus (COVID-19) ha sido un gran agente de cambio. Aquí cinco puntos de impacto directo que ha tenido la pandemia en nuestros hábitos:

1.Teletrabajo y/o educación a distancia: trabajar y estudiar desde la casa se hace acompañar de una serie de retos y desafíos propios de un ambiente que no ha sido ideado para tales fines. Al mismo tiempo, ha dado oportunidad a la adopciónmasiva de tecnologías como Zoom.

2. Innovación en mascarillas: a lo largo de este tiempo, hemos pasado de utilizar las tradicionales mascarillas quirúrgicas, KN95 o N95, que son las más recomendadas, a versiones de tela, las cuales son más ligeras y reutilizables. También se han visto propuestas que apuestan no solo a la comodidad sino a la transparencia, en un esfuerzo por facilitar la comunicación y socialización.

3. Higiene y limpieza: la llegada del COVID-19 nos ha obligado a ser más limpios. Los geles y jabones antibacteriales, entre otros productos de desinfección se han vuelto populares en los últimos 9 meses.

4. Servicios online: dada la necesidad de cumplir con el distanciamiento social, nos hemos visto en la obligación de utilizar la internet para realizar trámites y/o diligencias que solíamos hacer de manera presencial, tales como servicios bancarios y compra de productos, lo que, a su vez, ha propiciado un aumento del uso de deliverys.

5. Entretenimiento: como consecuencia del confinamiento y el toque de queda, nos hemos visto compelidos a pasar nuestros momentos de ocio en casa. Servicios como Netflix, videojuegos y Zoom han incrementado su popularidad. Esta última aplicación no solo es usada para fines de teletrabajo o educación, sino también para socializar.