Descubren que un conocido antidiabético retrasa el envejecimiento en monos

17-09-2024
Salud
La Razón, España
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Un fármaco de bajo coste contra la diabetes, la metformina, ha mostrado retrasar el envejecimiento en monos machos y ser especialmente eficaz para preservar tejidos del cerebro y del hígado, según un estudio de 3 años de seguimiento. Los resultados plantean la posibilidad de que esta molécula de uso generalizado pueda utilizarse algún día para retrasar el envejecimiento en los seres humanos.

Los monos que recibieron metformina diariamente mostraron un deterioro cerebral asociado con la edad más lento que los que no recibieron el fármaco. Además, su actividad neuronal se parecía a la de los monos unos seis años más jóvenes (equivalente a unos 18 años humanos) y los animales tenían una cognición mejorada y una función hepática preservada.

Este estudio, publicado en el último número de la revista Cell sugiere que, aunque morir es inevitable, «el envejecimiento, tal como lo conocemos, no lo es», señaló Nir Barzilai, un gerocientífico del Colegio de Medicina Albert Einstein de Nueva York, que no participó en la investigación.

Guanghui Liu, un biólogo que estudia el envejecimiento en la Academia China de Ciencias en Pekín, y sus colegas probaron el fármaco en 12 macacos cinomolgos machos de edad avanzada, otros 16 monos mayores y 18 animales jóvenes o de mediana edad, que sirvieron como grupo de control.

Cada día, los monos tratados recibieron la dosis estándar de metformina que se utiliza para controlar la diabetes en humanos. Los animales tomaron el fármaco durante 40 meses, lo que equivale a unos 13 años para los humanos.

Durante el estudio, Liu y sus colegas tomaron muestras de 79 tipos de tejidos y órganos de los monos, obtuvieron imágenes de los cerebros de los animales y realizaron exámenes físicos de rutina. Al analizar la actividad celular en las muestras, los investigadores pudieron crear un modelo computacional para determinar la «edad biológica» de los tejidos, que puede ser menor o mayor que la edad de los animales en años desde el nacimiento.

Frena la inflamación crónica

Los científicos observaron que el fármaco ralentizaba el envejecimiento biológico de muchos tejidos, incluidos los de los pulmones, los riñones, el hígado, la piel y el lóbulo frontal del cerebro. También descubrieron que frenaba la inflamación crónica, un rasgo clave del envejecimiento.

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El estudio no tenía como objetivo comprobar si el fármaco prolongaba la esperanza de vida de los animales.Investigaciones anteriores no habían establecido un impacto en la esperanza de vida, pero sí habían demostrado una prolongación de la misma, es decir, la cantidad de años que un organismo vive con buena salud.

Esto significa que la metformina puede «revertir eficazmente la edad de los órganos» en monos, afirmó Liu, según recoge la revista Nature. Los autores también identificaron una vía potencial por la que el fármaco protege al cerebro: activa una proteína llamada NRF2, que protege contra el daño celular provocado por lesiones e inflamaciones.

«Este estudio es el análisis más cuantitativo y exhaustivo de la acción de la metformina que he visto más allá de los ratones», destacó Alex Soukas, genetista molecular del Hospital General de Massachusetts en Boston. «Fue una sorpresa ver lo amplios que eran los efectos [del fármaco] en los distintos tipos de tejidos».

Liu y sus colegas han lanzado un ensayo con 120 personas en colaboración con la compañía biofarmacéutica Merck en Darmstadt, Alemania, que desarrolló y fabrica metformina, para probar si el fármaco retrasa el envejecimiento en humanos.

Más allá de la diabetes

La metformina se ha utilizado durante más de 60 años para reducir los niveles de azúcar en sangre en personas con diabetes tipo 2 , y es el segundo medicamento más recetado en Estados Unidos. Desde hace tiempo se sabe que el fármaco tiene efectos que van más allá del tratamiento de la diabetes. Esto es lo que ha llevado a numerosos grupos de investigadores a estudiarlo contra enfermedades como el cáncer, las cardiopatías y el envejecimiento.

Los datos obtenidos con gusanos, roedores, moscas y personas sugieren que el fármaco podría tener efectos antienvejecimiento. Pero su eficacia no se había probado directamente en primates, y aún no está claro si sus posibles efectos antienvejecimiento se consiguen reduciendo el nivel de azúcar en sangre o a través de un mecanismo independiente.