Este lunes, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, firmó la ley ‘No más olé’, que prohíbe por completo las corridas de toros en el país suramericano.

«Lo decía siendo alcalde, esa cultura, entre comillas, nos llevaría necesariamente y por coherencia a que, si nos divertimos matando al animal, entonces nos divertiremos matando a los seres humanos, que somos también animales», señaló Petro.

Según se informó en la red social X por parte de la presidencia de Colombia, el acto de aplicación de la norma tuvo lugar en la Plaza Cultural de La Santamaría, la antigua plaza de toros de Bogotá, con el fin de “celebrar la vida».

En una nota de prensa, el despacho presidencial señaló que la iniciativa «cumple con uno de los objetivos que Petro planteó en su campaña, que es impulsar «la prohibición de todo tipo de espectáculos que involucren prácticas de maltrato animal, incluidas las corridas de toros».

Con la promulgación de la ley, Colombia sale del reducido grupo de países que aún permiten esta práctica, en la que aún persisten siete naciones: España, Portugal, Francia, Ecuador, México, Perú y Venezuela.

La senadora del Pacto Histórico y autora de la normativa, Esmeralda Hernández, resaltó que la ley permite superar «el símbolo de la tortura» y «el símbolo de la dominación de los seres humanos sobre los otros animales».

«La tauromaquia lo que representaba era justamente eso: validar, legitimar, legalizar un espectáculo público de tortura y extremo sufrimiento animal, simplemente para la diversión de unos pocos», expresó Hernández, quien además recordó que la aplicación de la ley implicará un proceso de transición de tres años, por lo que «la prohibición no va a ser de un día para otro».

El proyecto que prohíbe las corridas de toros en Colombia fue aprobado por la Cámara de Representantes a finales de mayo. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, expresó su felicitación por la decisión a «quienes por fin lograron que no sea un espectáculo la muerte».

El gobernante explicó en ese momento que las personas que «se divierten con la muerte de animales terminarán divirtiéndose con la muerte de seres humanos», al igual que «los que queman libros terminarán quemando seres humanos».

El rejoneo, las becerradas, las tientas, las novilladas y otras actividades asociadas con la tauromaquia también quedan prohibidas por la legislación. El resultado de la votación en el Parlamento fue de 93 votos favorables y de solo dos en contra.