La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó este lunes que 123,538 palestinos se han visto obligados a desplazarse de la Franja de Gaza ante los ataques del ejército israelí.

El ente de las Naciones Unidas apuntó que se han desplazado más de 17,500 familias, mientras más de 73,000 personas están alojadas en escuelas, muchas de las cuales fueron declaradas como refugios de emergencia.

A su vez, se reportan más de 500 muertos por los bombardeos israelíes contra zonas civiles de la Franja de Gaza. Entretanto, se contabilizan 2,800 heridos, según dio a conocer esta jornada el Ministerio de Salud palestino.

El ataque de Tel Aviv se produce luego de que el pasado sábado la resistencia palestina ejecutara una ofensiva contra los asentamientos de colonos judíos en los alrededores de Gaza como respuesta al asalto a la Mezquita de Al-Aqsa en la Jerusalén Oriental ocupada y al aumento de la violencia de los colonos.

El Ministro de Defensa de Israel, Yoav Galant, ordenó este lunes la prohibición de entrada de alimentos y combustible a la Franja, mientras fue cortado el servicio de electricidad.

Decenas de toneladas de explosivos han sido arrojados sobre Gaza, principalmente en las zonas fronterizas al norte y al este de la Franja como parte de la política de tierra arrasada de Tel Aviv.

Esta jornada, según informaron medios locales, decenas de civiles murieron en una nueva agresión israelí con misiles contra un mercado y una mezquita en los campos de refugiados de Shati y Jabalya, en el norte de Gaza.