El Ejército israelí bombardeó este jueves el norte y sur de la Franja de Gaza, causando la muerte de al menos siete civiles de una misma familia en la ciudad de Khan Yunis, de donde también se han recuperado otros cuerpos sin vida.

También informó de la muerte de un supuesto alto oficial de Inteligencia del movimiento  de resistencia palestino Hamás, identificado como Yussef Rafik Ahmed Shabat.

De acuerdo al ente militar israelí, Yussef Rafik Ahmed Shabat falleció producto de un ataque aéreo y comentaron que la agresión contra el alto oficial de Hamas se logró tras varios días de asedió y desplazamiento forzoso.

Israel anunció que en otro ataque fueron eliminados al menos supuestos combatientes en un ataque aéreo dirigido contra el vehículo en el que se encontraban, si bien no se especifica la zona.

En la víspera los equipos de defensa civil palestina recuperaron los cuerpos de decenas de cadáveres de civiles tras la retirada una semana después de las tropas israelíes del norte de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza.

Según un comunicado del Gobierno gazatí alrededor 75 personas habrían muerto y cerca de 350 resultaron heridas tras una semana de ataques en la zona central del territorio palestino, mientras que «un centenar de ciudadanos continúan desaparecidos» en la zona de Al Maghraqah.

Más de diez cuerpos fueron recuperados en la ciudad de Khan Yunis, mientras que en el sur de Rafah, los aviones de guerra israelíes bombardearon una casa, matando al menos 8 personas, entre ellas 5 niños y 2 mujeres, según fuentes palestinas.

Por su parte, los bombardeos continuaron en las zonas del sur, suroeste y este de la ciudad de Gaza, sobre todo en los barrios de Sheikh Ajlin, Tal Al Hawa y Al Zaytun, causando heridos entre población civil.

Desde el inicio de la agresión israelí a la Franja de Gaza cerca de 33.900 gazatíes han muerto, según el Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza, en un territorio sumido en su peor crisis humanitaria, con la mitad de la población pasando hambre y casi dos millones de personas forzosamente desplazadas.