El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, puntualizó que 14,000 obras de infraestructura que están paralizadas en todo el país volverán a ser construidas.

En Maruim, en el estado de Sergipe, “dimos inicio a la reanudación de más de 14,000 obras detenidas” hace seis años, anunció Lula da Silva, quien refirió que “estamos reconstruyendo las políticas de crecimiento y desarrollo del país”.

“Vamos a viajar por todo Brasil anunciando la reanudación de las obras detenidas. Hay 4.000 obras detenidas en el área de educación, las retomaremos todas. Tengo 4 años que quiero dedicar cada hora a hacerle creer a la gente que el país va a funcionar”, puntualizó el dignatario.

Con la sapiencia de que “Brasil necesita volver a trabajar y la gente merece más calidad de vida, trabajo y dignidad”, el jefe de Estado acotó que estas obras que fueron paralizadas generarán ingresos, trabajo, consumo y calidad de vida.

«La rueda de la economía vuelve a girar para mejorar la vida de las personas», puntualizó el mandatario en el contexto de su visita a Sergipe, donde se retomó la ampliación de una carretera que atraviesa todo el noreste del país, paralizada desde 2020.

De acuerdo al Gobierno brasileño, esta obra ha generado un millar de empleos en la que es una de las regiones más pobres de Brasil.

Entre tanto, Lula da Silva anunció que “la próxima semana vamos a anunciar una nueva Bolsa Familia de 600 reales y otra de 150 reales por niño, para que las familias puedan comprar alimentos de calidad para sus hijos”.